El presidente del Cabildo de Fuerteventura, con una petición de más de cuatro años de cárcel, quiere ser senador del PSOE

El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta, del PSOE, ha pedido a su secretario general, Ángel Víctor Torres, presidente del Gobierno canario, que tramite ante los órganos del partido en Canarias su pretensión de ser designado senador por la Comunidad Autónoma. La candidatura de Acosta a ese puesto, que quedó vacante hace unas semanas por la dimisión de Pedro Ramos por motivos de salud, coincide con la petición del Ministerio Fiscal de más de cuatro años de prisión para él por varios delitos presuntamente cometidos durante su gestión al frente de la empresa de gestión urbanística del municipio majorero de Pájara. del que fue concejal.

Blas Acosta ha reconocido este lunes públicamente que pretende ese puesto de senador a pesar de las amenazas judiciales y el éxito de una probable moción de censura que se cuece desde hace semanas en el Cabildo del que es presidente al quebrarse el pacto que hasta ahora lo sustentaba.

El Ministerio Fiscal solicita para el presidente del Cabildo de Fuerteventura una condena de cuatro años y tres meses por los delitos de administración desleal e insolvencia punible por unos hechos presuntamente cometidos cuando estaba al frente de la empresa Gestión Urbanística de Pájara (Gesturpa), ha publicado Diario de Fuerteventura. Según el escrito de acusación del Ministerio Público, Acosta habría tomado decisiones incompatibles con la realidad de la empresa, que se encontraba en causa legal de disolución y en situación de inminente insolvencia.

La candidatura de Blas Acosta se anuncia después de que se publicara que el PSOE de Tenerife había propuesto para el puesto de senador por la Comunidad Autónoma al concejal de La Laguna Santiago Pérez, un histórico del partido que lo abandonó durante años pero al que regresó hace unos meses. Pérez fue senador del PSOE durante varias legislaturas y llegó a ocupar el puesto de secretario del grupo parlamentario socialista, entre otros cargos relevantes.

De lograr el puesto de senador, Blas Acosta pasaría a estar aforado ante el Tribunal Supremo, por lo que las causas judiciales que pesan contra él en los juzgados de instrucción de Fuerteventura pasarían a ser responsabilidad del alto tribunal.