Canarias, un mes con la incidencia estancada

Un “punto de estacionamiento que no logramos abandonar”. Así describió Julio Pérez, portavoz del Gobierno de Canarias, la situación epidemiológica de las Islas hace casi dos semanas, después de la celebración del Consejo de Gobierno en el que se analizan los informes diarios elaborados por la Consejería de Sanidad. Lo cierto es que con el mantenimiento de los niveles de alerta (Gran Canaria, Tenerife y Fuerteventura, nivel 3; Lanzarote y La Graciosa, nivel 2; y El Hierro, La Gomera y La Palma, nivel 1) y Semana Santa de por medio, los datos arrojan la misma sensación que indicó el portavoz del Ejecutivo: un estancamiento que se traduce en una línea sin curvas de subidas o bajadas, estable.

El día en el que Pérez expuso esta situación, 25 de marzo, y explicó, a su vez, el endurecimiento de las medidas de protección de cara a la siguiente semana festiva, el Archipiélago tenía una incidencia acumulada (IA) a 14 días de 139 casos por cada 100.000 canarios. Este martes, ese mismo indicador registra un descenso: 121,7 casos. Una ligera bajada en comparación con meses atrás, pero no una gran mejora tras dos semanas, teniendo en cuenta también el aumento de las restricciones por la Semana Santa. Sin embargo, y pese a este estancamiento, si se analiza la incidencia por islas, lo cierto es que hay datos destacables.

Desde el 27 hasta el 30 de marzo, El Hierro, isla en la que también hay que tener en cuenta su densidad poblacional a la hora de analizar su situación pandémica, notificó una IA a 14 días de 9 casos por cada 100.000 habitantes. Desde ese día hasta ahora, esa cifra se ha convertido en un cero tan redondo como el de sus casos activos actuales.

La Palma, Lanzarote y La Gomera siguen teniendo una incidencia a 14 días por debajo de la media, aunque las dos primeras han experimentado un leve ascenso.

Otro dato reseñable es que Fuerteventura puede presumir de pasar de ser la isla que notificaba una mayor IA a 14 días desde mediados del mes pasado a bajarla de tal manera que, desde el cuatro de abril, se sitúa por debajo, con una tendencia al descenso.

Tenerife ha intentado seguir la estela de la isla majorera, pero no lo ha conseguido, por los pelos, ya que este martes, en su viaje de desescalada, se ha solapado a la media regional sumando 121,1 casos por cada 100.000 tinerfeños.

Dentro de este estancamiento en el que las cifras bailan, pero no se alejan mucho unas de otras, Gran Canaria es la única que sigue rebasando la media de IA a 14 días del territorio, con una tendencia al alza. Este martes, la isla redonda copó la mayor parte de los contagios diarios, notificando 117 nuevos casos en las últimas 24 horas.

A pesar de que las cifras no son alarmantes y tienden, en general, a la mejora, estos datos siguen sin salir de ese “estacionamiento” al que hizo alusión el portavoz del Ejecutivo regional hace dos semanas, haciendo que la incidencia de Canarias siga acomodada en un estancamiento.