Claudio Alonso, director general de Domingo Alonso y Presidente de Foresta, afirmó que “es grave la pérdida de 310.000 euros en subvenciones destinadas a la reforestación del Achipiélago por culpa de los problemas burocráticos derivados de la mala gestión del Gobierno de Canarias, a quien reclamó un mayor compromiso y apoyo económico para desarrollar esta labor de recuperación del medio ambiente que es urgente en las Islas”.
Las subvenciones “perdidas” a las que se refiere Foresta son las convocadas por el Gobierno de Canarias y cofinanciadas por el Fondo Europeo de Orientación y de Garantía Agrícola (FEOGA) correspondientes al año 2006, que han sido, según Alonso, “desaprovechadas debido a las trabas burocráticas del Ejecutivo canario”.
Esta “negligencia” ha impedido que Foresta obtenga las ayudas necesarias para repoblar 60 hectáreas que equivalen a alrededor de 120 campos de fútbol y disponer de 100.000 euros para acometer estas actuaciones medioambientales en el Archipiélago.
Claudio Alonso, señaló que “es incomprensible que teniendo la biodiversidad que tenemos estemos en el furgón de cola de las inversiones para reforestación”. En este mismo sentido Alonso puntualizó que “hemos hecho un cálculo de lo que significa eso sobre la superficie y estamos hablando de un 0,33 % de lo que debería ser invertido o aprovechado de los fondos comunitarios”.
En Gran Canaria, por ejemplo, el 90% de la superficie está en manos privadas y Claudio Alonso indicó al respecto que “ahí la Administración Pública no puede actuar. Foresta tiene una razón de ser y es que el 83% de lo que necesita la entidad para realizar su actividad proviene de fondos privados y sólo el 17 % de los fondos que utiliza son públicos”.
El presidente de Foresta destacó que “el Ministerio de Medio Ambiente habla de que el suelo canario está considerado bajo un grave riesgo de desertización y es que hablamos del 90,5%”.
Por su parte, otro de los patronos de la Fundación Canaria para la Reforestación, Juergen Flick afirmó que “más del 50% del suelo canario ya está degradado biológicamente, siendo irrecupareble”. Sobre las causas de ese deterioro Flick indicó que “influye el abandono de la agricultura, la destrucción de los bosques, la erosión, la salinización de los suelos y la presión demográfica”.
Juergen Flick destacó además que “la pérdida de la cubierta vegetal y de la biodiversidad, la pérdida de calidad de los recursos hídricos y la degradación del suelo son problemas realmente acuciantes que necesitan de una pronta solución”.
Canarias, Valencia y Murcia son las tres comunidades autónomas con mayor riesgo de desertización del país. El 90,48% del territorio canario presenta un riesgo de desertización muy alto. Flick señaló que “otro problema en Canarias es el incumplimiento del Protocolo de Kyoto y se sitúa entre las comunidades autónomas españolas con mayor tasa de erosión y de gases de efecto invernadero”.
Juergen Flick añadió que “Canarias posee también el triste récord de ser una de las regiones europeas con mayor número de especies amenazadas. Tan sólo en las Islas existen 29 especies al borde de la extinción. Se estima que a nivel mundial desaparecen 30.000 especies cada año, 3 especies cada hora”.
En la última década se han descubierto en Canarias 600 especies animales y 35 de plantas, “especies que pueden perderse si no respetamos el medio ambiente”, señaló Flick.
Ángel Luis Sánchez Bolaños, director general de Global aseguró que la labor de Foresta se hace “más difícil por culpa de la mala gestión del Gobierno canario”. Sobre esta cuestión destacó que “cuando Foresta se pone en contacto con titulares privados de fincas, los convencemos de que hacemos los proyectos de reforestación, presentamos toda la documentación al Gobierno autónomo y luego resulta que los certificados que exige el propio gobierno les caducan”. De esta forma puntualizó “sólo conceden el 0,3% de los recursos disponibles”.
Sánchez Bolaños afirmó que “es muy grave lo que está pasando. Hay incertidumbre y así no podemos convencer a titulares privados de fincas de hacer este tipo de cosas si al final el proceso no es el correcto, por culpa de la gestión administrativa”.
El director general de Global planteó además que “somos de las regiones españolas con mayores problemas de reforestación y el coste de llevarla a cabo es más alto que en otros sitios”. En este sentido añadió que “nos quitan las alas para seguir actuando si no recibimos el apoyo y dinero necesario”.
La Fundación Canaria para la Reforestación (Foresta) nació en diciembre de 1998, ante la preocupación de un grupo de profesionales y amantes de la naturaleza, frente al abandono de los terrenos de los propietarios privados y la situación actual del ecosistema vegetal canario.
La Fundación tiene una clara vocación de colaboración y participación, tanto con la sociedad en general, como con las distintas instituciones y organismos públicos. El principio fundacional de Foresta es el aumento y la mejora de las superficies forestales insulares, sujetando la tierra frente al deterioro erosivo por la deforestación histórica, apoyando la creación de nueva vida y el mantenimiento de la biodiversidad.