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La senda costera comienza a recuperar su aspecto natural con la retirada del vallado
La senda costera de Santander recupera poco a poco su aspecto natural. Las protestas de los vecinos, los colectivos ecologistas y los partidos de la oposición han acabado por surtir efecto. Al menos, de momento. El recorrido que une el Faro de Cabo Mayor y la Virgen del Mar, uno de los lugares más emblemáticos de la capital y con mayor valor medioambiental, sufrió los efectos de unas obras calificadas de “excesivas” en el intento de peatonalizar un camino natural que es el orgullo de muchos paseantes de la ciudad.
Según ha comunicado este lunes el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Demarcación de Costas en Cantabria, han comenzado los trabajos de retirada de parte del polémico vallado de la senda costera “por motivos de seguridad”. La Delegación del Gobierno en Cantabria ha explicado en una nota de prensa enviada a los medios de comunicación que esta retirada del vallado la está ejecutando TRAGSA.
Sin embargo, el Ministerio continua trabajando para elaborar un nuevo proyecto para la senda costera, que posteriormente será sometido a la mesa constituida por el Ayuntamiento de Santander, de la que además de los grupos políticos municipales forman parte las asociaciones vecinales y la Asamblea en Defensa de la Senda y Costa Norte de Santander, el organismo que se constituyó para denunciar las obras que acaban con uno de los pocos parajes sin urbanizar en la capital de Cantabria.
Esta acción había sido anunciada previamente por el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, que indicó que Costas incorporará al proyecto de la senda “todas las iniciativas y acciones” propuestas por el Ayuntamiento. Entre ellas, destacó la retirada de la práctica totalidad del vallado de la senda que ahora se produce, que solo se mantendrá en “puntos conflictivos” del trazado para mantener las condiciones de seguridad de los peatones.
Mientras, la Asamblea en Defensa de la Senda Costera sigue a la espera de respuestas, después de registrar varias peticiones destinadas a las instituciones implicadas en el proyecto. La agrupación continúa reclamando “una solución para la problemática ocasionada” por estas obras.
Unas reclamaciones que se han visto refrendadas por el Defensor del Pueblo, que ha solicitado al Ministerio de Medio Ambiente, al Gobierno de Cantabria y al Ayuntamiento de Santander una ampliación de la información remitida por estas tres administraciones, tal y como explicó en un escrito de respuesta dirigido a un integrante de la Asamblea en Defensa de la Senda Costera, a raíz de una queja por las obras “excesivas” en el proyecto y el “deterioro” ambiental sufrido en la zona.