Arca califica de “error histórico” el Plan Parcial de La Remonta
La asociación ecologista Arca ha hecho público este miércoles su disconformidad con el Plan Parcial de La Remonta aprobada recientemente por el Ayuntamiento de Santander con los votos favorables del PP y PSOE. A su juicio, la autorización para construir pisos en esta finca de 30 hectáreas “frustra” la posibilidad de crear un cinturón verde a la entrada de la ciudad uniendo el parque de Peñacastillo, La Remonta y el parque del Doctor Morales, con lo que se “rompe definitivamente con la esperanza de avanzar hacia un modelo de ciudad más habitable y moderna”.
Para Arca, resulta “injustificable” que en una ciudad donde la población ha disminuido en los últimos 20 años de manera constante, en la que además de las numerosas viviendas vacías existen dificultades para ocupar las viviendas sociales, se pretenda construir aún más viviendas “a costa de privar a la ciudad de uno de los espacios verdes todavía libres en la periferia del municipio, con alto valor ambiental y estratégico para un desarrollo futuro que evite los errores y carencias que Santander arrastra desde el pasado en su planificación”.
En su opinión, la creación de “un gran parque naturalizado, libre de viviendas, ayudaría a modernizar el diseño urbano de Santander”. “Santander ha basado históricamente su desarrollo en un crecimiento disparatado y desmedido de la construcción de viviendas, hasta prácticamente agotar el suelo municipal disponible, olvidándose de la importancia de los espacios naturales y lugares de esparcimiento, descanso y relajación para sus ciudadanos, en un entorno natural y no agresivo”, argumenta la asociación.
Por todo ello, consideran que la aprobación del Plan Parcial “supone acabar con uno de los últimos espacios libres que podrían contribuir a hacer de Santander una ciudad más amable y habitable para sus ciudadanos”, y también demuestra la “rigidez e incapacidad de los gestores y quienes les apoyan para adaptarse a las circunstancias y demandas actuales de la sociedad”, así como “su carencia de un modelo territorial alternativo para la ciudad, distinto del actual”.
Finalmente, critican al equipo de Gobierno que reduzca el urbanismo a la continua construcción de viviendas, “priorizando los intereses económicos de los promotores sobre el interés social y la calidad de vida de la inmensa mayoría de los habitantes de la ciudad”.