“Ciudadanos no va a bloquear el país, va a facilitar la gobernabilidad”
Carlos Pracht (Barcelona, 1949) formará parte del Congreso de los Diputados durante la próxima legislatura como único representante de Ciudadanos por Cantabria. Los más de 53.000 votos que el partido de Albert Rivera cosechó en la comunidad autónoma permitirán a este médico jubilado ocupar un escaño en la Cámara Baja a pesar de protagonizar uno de los momentos más polémicos de la campaña, cuando equiparó el maltrato a las mujeres con la “violencia feminista” y calificó el aborto como “una forma más de violencia”. Tras conocer el veredicto de las urnas, pretende dar por zanjado ese episodio y anima al resto de formaciones políticas a actuar con “sentido de estado” para mejorar la vida de los ciudadanos. “No queremos que la gente nos siga, queremos que la gente nos acompañe”, asegura.
¿Cómo está viviendo el día después de confirmar su acta como diputado para la próxima legislatura?
Estoy aprovechando para poner orden en el despacho, porque la campaña ha sido larga y siempre surgen cosas nuevas que te impiden mantener tu ritmo de vida habitual. A mí me gusta el orden, así que en eso estoy.
¿Qué valoración hace de los resultados del 20D?
Hemos tenido un gran resultado electoral en Cantabria. Ciudadanos ha obtenido más de 53.000 votos y lo mejor es que, en tan solo seis meses, prácticamente hemos triplicado los resultados del mes de mayo. Esto es algo histórico, porque hemos conseguido romper el tradicional bipartidismo. Todos estos datos dan ejemplo de la solidez de nuestro proyecto y de la confianza que los votantes han depositado en nosotros. Estamos muy agradecidos y espero ser la voz de todos los cántabros, de los que no nos han votado también. Este es un proyecto incluyente y espero demostrarlo desde el Congreso de los Diputados.
¿Qué prioridades se marca para esta legislatura?
La prioridad es recuperar algo que no se tenía que haber perdido nunca, que es el diálogo para alcanzar consensos y acuerdos de estado. Las mayorías absolutas, vengan de donde vengan, no son buenas. La democracia es llegar a acuerdos.
¿Cuál puede ser la solución para formar un Gobierno estable?
Yo creo que tenemos que ver la actitud de los distintos partidos políticos. A nosotros nos gustaría ver una actitud de generosidad, de anteponer el bien común, el bien de España y de los españoles, al bien de cada partido. Desde luego, tendremos que negociar. Se han acabado los rodillos y hay que poner encima de la mesa qué es lo que nos une para hablar de cómo resolvemos los problemas que tienen los ciudadanos. Nos han votado para eso.
¿Cree que es posible un acuerdo entre el PP y el PSOE para facilitar la investidura de la fuerza más votada o es factible una repetición de las elecciones?
Nosotros vamos a poner a España por delante de Ciudadanos. Si los demás hacen esto, tendrán una actitud de responsabilidad. Ciudadanos no va a bloquear el país, va a facilitar la gobernabilidad. Veremos si el resto de los partidos son capaces de dialogar y de ceder por el interés general. España necesita gobernantes con visión de estado. Los tiempos han cambiado y la sociedad ha pedido cambio.
Tanto en Cantabria como a nivel nacional, Ciudadanos ha acabado como cuarta fuerza política, muy lejos de sus previsiones iniciales. ¿Ha supuesto cierta decepción el resultado final?
No, ni mucho menos. Nosotros partíamos de cero, no teníamos representación parlamentaria. Ahora no somos una fuerza determinante, pero sí a tener en cuenta en el Congreso de los Diputados. Estamos encantados con los resultados y tenemos muy altas las expectativas. Entiendo la incertidumbre, pero nosotros estamos listos y preparados para sentarnos a hablar con quien sea, siempre y cuando sea para alcanzar acuerdos por el bien común.
La sensación que se traslada es que la campaña se ha hecho demasiado larga para Ciudadanos, que se han desinflado sus expectativas día a día. ¿Cómo lo han vivido desde dentro?
No estoy de acuerdo, no lo veo así ni mucho menos. Ha sido una campaña complicada, pero la hemos vivido con mucha ilusión. Creemos que hay que vivir una nueva transición. Lo que proponemos es la no resignación, defendemos la posibilidad de conseguir juntos un futuro mejor.
Ha habido algunos temas, como la postura de Ciudadanos en relación a la violencia machista, que han sido controvertidos a lo largo de la campaña. ¿Cree que ha tenido repercusión en el resultado final de su partido?
Bueno, siempre hay polémicas. Si no es por una razón, es por otra. Creo que ese tema está superado.
¿Mantiene su posición respecto a la violencia y el aborto?
Mi opinión personal y política coincide plenamente con el programa de Ciudadanos y con el ideario del partido que represento y este tema ha quedado suficientemente claro. Estoy absolutamente convencido de que las propuestas que defendemos son las mejores para abordar este asunto.
¿Y cómo llega a formar parte del proyecto político de Ciudadanos?
Yo he participado en la confección de la tarjeta sanitaria europea, he participado en la fundación de la confederación de pacientes en España, después de ser durante años asesor del consejero de Sanidad de Madrid... Durante cuarenta años me he dedicado a ayudar a las personas como médico. Ahora ha llegado un momento en el que pienso que puedo hacer algo de forma colectiva. En el partido creen que puedo ser una persona útil para cambiar la situación hasta el punto de que he acabado liderando la candidatura al Congreso. Espero trabajar los próximos cuatro años en algo que va a cambiar la vida de muchas personas. Eso supone una gran responsabilidad y es lo que más me preocupa.
¿Cómo se plantea la legislatura en el plano personal?
Puede suponer un cambio de vida importante, pero estoy dispuesto a poner todo de mi parte si va en beneficio de los cántabros y de los españoles. Voy a ser honesto, no vengo aquí a por sillas. Lo que me mueve es el hambre de que se haga justicia, que no venganza. Tenemos que construir, no destruir.
Su trayectoria profesional está ligada directamente al ámbito sanitario. ¿Será ahí donde aporte su experiencia a Ciudadanos en el Congreso?
Sí, sí. Nuestro partido está muy profesionalizado. Yo no sé de muchas cosas, pero en el ámbito sanitario, donde he trabajado durante cuarenta años en el sector público, lo tengo clarísimo. En Cantabria tenemos unas circunstancias muy especiales, con un hospital como Valdecilla que ocupa un lugar prioritario en el conjunto de la comunidad autónoma. Tengo una serie de ideas que me gustaría poner en marcha. Cantabria tiene a su alcance jugar en Primera División, no debemos resignarnos con jugar en Tercera. Tenemos por delante el reto de competir en un mundo globalizado.
¿Y eso cómo se concreta?
Tenemos un hospital fantástico pero no podemos conformarnos con eso. A lo mejor, debemos plantearnos intercambios de paquetes sanitarios desde el punto de vista internacional, a lo mejor la universidad también tiene que jugar un papel más social, que se ocupe más de los problemas sociales... Yo creo que debemos cortar la cuerda y que Cantabria se expanda. Esa es mi idea. Puede haber ideas mejores, pero yo tengo esta. Lo vamos a intentar.
¿Qué modelo sanitario defiende? ¿Cree que la sanidad pública es sostenible o apuesta por otro tipo de gestión?
Un modelo es un modelo. Si me pregunta si hay un modelo ideal, no, no lo hay. Si la pregunta es si el modelo actual es soportable, si podemos mantener el estado de bienestar actual, esto es mucho más delicado y hay que reflexionar sobre ello. Creo que tenemos las herramientas suficientes para hacerlo sostenible, pero a lo mejor se pueden utilizar mejor estas herramientas y hacer que funcione todo de otra forma. Hay problemas como el del envejecimiento de la población que conlleva un coste. Tenemos que diseñar fórmulas que nos permitan mantener el estado de bienestar que disfrutamos, que es envidiable. Hagamos todo aquello que nos permita avanzar.