El Ayuntamiento de Santander prepara un Plan de acción contra el ruido con tres líneas estratégicas y presupuesto
El Ayuntamiento de Santander ha mantenido este jueves un encuentro con representantes de los vecinos de Pombo-Cañadío y Ensanche, con el objetivo de hacerles partícipes de los avances del Plan de acción contra el ruido, del que ya tiene definidas tres líneas estratégicas y fijados los plazos para comenzar con su implantación, por lo que trabaja en dotar de presupuesto a las actuaciones previstas para el próximo 2025.
Asimismo, antes de que acabe el año, modificará la ordenanza municipal para evaluar y declarar las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS).
En la reunión, han tomado parte la concejala de Medio Ambiente, Margarita Rojo, y la responsable municipal de Barrios, Lorena Gutiérrez, ha informado el Consistorio en nota de prensa.
Según se ha trasladado a los vecinos, el Ayuntamiento ya tiene definidas las tres líneas estratégicas del plan, que son transversales y afectan a distintas áreas y servicios municipales.
Están centradas en la gestión y control del ruido ambiental; la sensibilización, divulgación y educación contra la contaminación acústica; y la gestión municipal para la mejora frente al ruido.
Además, Rojo ha avanzado los plazos para comenzar con la implantación del plan, de modo que ya se trabaja en dotar de presupuesto a las actuaciones previstas para 2025.
Al tiempo, la responsable de Medio Ambiente ha comunicado a los vecinos que el Consistorio iniciará en las próximas semanas la modificación de la ordenanza municipal del ruido, --en concreto del artículo 8, referido a las ZAS--, tal y como se aprobó en Pleno y con el objetivo de incluir el procedimiento para evaluar y declarar las áreas en las que se incumplan los objetivos de calidad acústica.
Para ello, antes de que finalice el año, se llevará a cabo una audiencia a los vecinos a modo de información pública previa para recibir sugerencias y alegaciones.
Rojo ha remarcado que, a pesar de que el ruido de ocio no es una fuente de ruido a evaluar dentro de lo exigible para un Mapa Estratégico de Ruido según la legislación vigente, el Ayuntamiento “está comprometido con los vecinos y por ello se encuentra estudiando las molestias generadas por el ruido de ocio en las zonas más problemáticas de la ciudad y las medidas a implementar”.
“Diálogo constructivo”
Por otra parte, desde la Asociación de Vecinos de Pombo-Cañadío han valorado el encuentro como un “diálogo constructivo” y, aunque han constatado un “adecuado” cumplimiento de la moción aprobada y “avances reales”, han solicitado un “ritmo más rápido y unos plazos más cortos”.
“Es muy importante que el equipo de Gobierno reconozca que el Ensanche tiene un grave problema con el ruido que es necesario abordar de forma urgente por mandato legal y por salud pública”, han afirmado.
La asociación de vecinos, asimismo, ha pedido que todo el Ensanche se declare como ZAS y ha señalado que existen 13 puntos de “conflicto” donde se superan los niveles de ruido permitidos por la normativa vigente.
Estas zonas se extienden desde el norte, en el Río de la Pila, hasta el sur, en el Paseo de Pereda, y desde el oeste, en la zona del Arrabal y la Calle del Medio, hasta Casimiro Sainz.
Además, en el encuentro, los vecinos han hecho saber a las autoridades que estarán “pendientes y muy vigilantes” en el cumplimiento de los plazos y los compromisos adquiridos.
Igualmente, también han manifestado sus quejas sobre los conciertos organizados con “asiduidad” por el Ayuntamiento en la zona de Cañadío, “contribuyendo a generar aun más ruido”.
En respuesta, el Consistorio les ha asegurado que “no programará nuevos conciertos en esta zona ya tan saturada acústicamente”.
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