El Ayuntamiento de Daimiel destina las vacaciones de escolares a enseñarles toreo
En la localidad ciudadrealeña de Daimiel, los niños tienen como actividad creada por el Ayuntamiento junto a la Peña Taurina local y la Escuela Taurina 'Puerta Grande' de Miguelturra (Ciudad Real) numerosos talleres bajo el nombre 'Jugamos al toro' y por el que desde el Ayuntamiento enseñan a los niños todo lo relacionado con los toros, en actividades que van desde decorar su propio capote hasta enseñarles a dar pases a los animales (ficticios) o demás actos de la tauromaquia.
Durante estos días en prácticamente todos los pueblos de Castilla-La Mancha se desarrollan actividades con las que entretener a los más pequeños, también para que los padres que trabajan puedan tener un tiempo en el que sus niños se entretengan. Los talleres de tiempo libre en esta época del año no faltan en toda la región, si bien ha sorprendido que Daimiel destine los recursos a una práctica como el toreo.
Así, este domingo más de 100 niños han aprendido cosas sobre la tauromaquia en el Pabellón Ferial de la localidad. Los niños, vestidos de torero, han podido aprender a dar pases a los animales así como hacerse fotos con algunos de sus referentes televisivos infantiles (como Bob Esponja) decorado con motivos taurinos.
Desde la Peña Taurina de Daimiel señalan que el objetivo es “familiarizar a los niños con la tauromaquia” en la que ha sido la primera edición de este taller, dentro de las actividades de Brujilandia, un espacio que desde el 23 de diciembre al 5 de enero hace del Pabellón Ferial local un espacio para los más pequeños con diversas actividades diarias y talleres.
Toreros y diestros locales han enseñado a los niños a hacer estos pases y movimientos del toreo y tampoco ha faltado a mediodía un particular “encierro” para que los niños vivieran la experiencia en primera persona, según los organizadores.
El Ayuntamiento ha destacado el éxito de este taller con la alta participación destacando también que han sido más las niñas las participantes que los niños, así como el “arte” de algunos de los pequeños de los que destacaban ya sus buenas maneras para con el toreo manejando el capote. Una ocasión también especial, según los organizadores, para los padres, ya que podían ver por primera vez vestido de torero a sus hijos.