El cuatro de febrero, la Empresa Nacional de Residuos Radioactivos (ENRESA) cesó a Eugenio Alejandre Siscar, director de Administración, que se produjo el pasado 27 de enero. La extinción del contrato del dirigente fue calificada como “congruente” por la empresa, según informó Europapress, debido a que los perjuicios ocasionados a la empresa estatal “no han sido pocos” y que su relación era “nula” con gran parte de la mayoría de los miembros de ENRESA.
Este es uno de los ceses que Ecologistas en Acción ha valorado como arriesgados y como un ejemplo de la presión que se está llevando a cabo para acelerar la adjudicación de la construcción del llamado ‘cementerio nuclear’ en la localidad conquense de Villar de Cañas. La organización señala en nota de prensa que la cercanía de las elecciones también juega un papel en “los nervios y las prisas”.
Debido a esta situación, Ecologistas en Acción anuncia que ya estudia posibles acciones legales, al prever que cuando se conceda el contrato, si no se cuenta con el permiso del Consejo de Seguridad, podría ser ilegal y pretenden con esto frenar una maniobra “con tintes de prevaricación”. El Consejo de Seguridad Nacional cuenta ya con los estudios independientes que señalan los “graves problemas” del emplazamiento en Villar de Cañas para instalar el Almacén Temporal Centralizado, incluso un estudio de la consultora URS que califica el emplazamiento como “inadecuado”, como anuncia la organización.