Los cargos de Podemos que acusaron a David Llorente de trato sexista declararán por supuestas injurias

En abril del año pasado se hizo público un documento en el que nueve “miembros de Podemos” -cuyos nombres no trascendieron- acusaban al diputado de esta misma formación en Castilla-La Mancha, David Llorente, de “trato sexista y discriminatorio”. Desde el primer momento, el diputado negó estas acusaciones y anunció la interposición de una querella contra los firmantes del documento por delito de injurias y calumnias. La querella, según ha informado el propio Llorente, ha sido admitida a trámite y por tanto, quienes firmaron ese documento tendrán que acudir al juzgado a declarar como imputados porque “el juzgado ha apreciado indicios de comisión de delito”.

Llorente ha insistido en que estas acusaciones respondieron entonces a una campaña de “desprestigio” contra él. Según reitera, las declaraciones que hicieron en los días posteriores tanto el secretario regional de Podemos, José García Molina, como su número dos, María Díaz, confirmaron este extremo.

García Molina, ha añadido, “aprovechó la coyuntura de manera irresponsable y oportunista, para desautorizarme públicamente como portavoz del grupo parlamentario y la Secretaria de Organización, María Díaz, hizo también declaraciones públicas en las que se refirió a las acusaciones como hechos y afirmó que no se podía cuestionar su veracidad, vulnerando flagrantemente mi derecho a la defensa y a la presunción de inocencia”. Anunciaron además una investigación interna en el partido de la que, casi un año después, “no ha vuelto a saberse más”. 

“De hecho, esas acusaciones no dieron lugar a ninguna denuncia contra mí ni en la Comisión de Garantías Democráticas del partido, ni en el juzgado, ni en las Cortes de Castilla-La Mancha, como certificaron las propias Cortes, todo lo cual confirma que carecían de cualquier fundamento porque eran y son totalmente falsas. Lo que habrá que determinar ahora en el juzgado es si esas acusaciones, además de ser falsas, constituyen delito”, ha destacado. 

Llorente no ha querido hacer públicos los hombres de los nueve “liberados” (personas de Podemos que perciben un salario, ya sea del partido o de una institución en la que el partido tenga representación), pero sí ha dicho que son cuatro hombres y cinco mujeres “estrechamente vinculados” a José García Molina y María Díaz y de su “entorno directo de confianza”. Apela al respeto al procedimiento judicial para no nombrarlos pero sí afirma que varios de ellos trabajan directamente para José García Molina, en la Vicepresidencia Segunda del Gobierno regional, o para María Díaz, como trabajadores adscritos a la Vicepresidencia Primera de la Mesa de las Cortes; y que la mayoría han formado o forman parte de candidaturas de la formación morada para los próximos comicios. “Ahora todas esas personas tendrán que acudir al juzgado como investigadas”.

“No puede tolerarse de ninguna manera que algo tan serio como el machismo se utilice de manera falsa y espuria para difamar a una persona. En Podemos, desde luego, no cabe la difamación, ni las acusaciones sin pruebas. Es algo totalmente contrario a nuestro código ético y también contrario a la ley”, ha concluido.