Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Los vecinos de una urbanización inacabada desde los años 70 dan el salto electoral porque “nadie hace nada”

Candidatura del Grupo Independiente de Albalate (GRIAL) a la Alcaldía en Albalate de Zorita (Guadalajara)

Carmen Bachiller

7

“Hemos decidido unirnos, somos cientos, y lucharemos presentándonos a las elecciones”. Los vecinos de una enorme urbanización en el municipio de Albalate de Zorita (Guadalajara) dan el salto a las urnas tras décadas denunciando que ni la empresa responsable ni el Ayuntamiento han cumplido con su obligación “histórica” de terminar de urbanizar (y además pagarlo) esta parte del municipio en la que residen. 

Llevan así desde los años 70 del siglo XX. Fue entonces cuando empezó a construirse la urbanización Nueva Sierra. Sus habitantes aseguran que parte del dinero que pagan para conservar y mantener las instalaciones se destina a urbanizar terrenos por parte de una empresa privada que después pone las parcelas a la venta. 

Denuncian que esta empresa lo hace “en connivencia” con el Consejo Rector de la Entidad Urbanística Colaboradora de Conservación (EUCC) que se ocupa de la gestión y el mantenimiento de la urbanización. Además, creen que el ayuntamiento ha hecho reiterada “dejación de funciones”. Tampoco han recibido respuesta a sus quejas por parte de la Consejería de Fomento. 

Diana Da Silva es la presidenta de la Asociación de Propietarios que representa a unos 600 vecinos. Ahora se presenta a la Alcaldía mediante una agrupación de electores, el Grupo Independiente de Albalate (GRIAL). “Creemos que es la solución”, explica en conversación con elDiarioclm.es. “Si el Ayuntamiento no nos echa una mano, tendremos que hacerlo nosotros”, afirma rotunda. 

“Todo sigue igual. Aquí tenemos un asunto super complejo y muy turbio. Todo está oscuro y tanto la entidad de conservación como el ayuntamiento lo tapan todo. No podemos acceder a ningún tipo de información sobre los proyectos, los planes de urbanización… Llevamos años pidiéndola”, asegura.

En este municipio de Guadalajara gobiernan los socialistas con un candidato independiente, Alberto Merchante. Opta a revalidar la Alcaldía y competirá con tres formaciones políticas en las que todos los candidatos son nuevos. El PP concurre con Julio Vicente Villalba como cabeza de lista, la Coalición Independiente-Hablamos Albalate de Zorita (CIHGU) se presenta con Janusz Kapusta como candidato y el grupo creado por los vecinos de la urbanización Nueva Sierra aspira también a tener representación en un Consistorio que tiene siete concejales. 

“No soy política. Soy ama de casa, tengo mi empresa y soy madre de familia. No tengo ninguna necesidad de hacer esto, pero no puedo soportar que nos engañen y que nadie haga nada. Lo hago porque es lo único que me queda”. Diana Da Silva asegura que busca “justicia para la urbanización”. 

Pone como ejemplo el que considera el último desatino que afecta a su familia y a cientos de propietarios. “Están construyendo un depósito de agua cuyo proyecto está valorado en un millón de euros, cuando a nosotros en la asamblea de propietarios nos presentaron un presupuesto de 300.000”, critica la también presidenta de la Asociación de Propietarios. “Es un cachondeo”.

Reclama “transparencia” y confía en obtener, al menos, un concejal. “Así podremos tener acceso a la información y voz en los plenos municipales”. La candidata a la Alcaldía se muestra optimista. “Estamos recibiendo el apoyo de muchos propietarios de la urbanización y también de vecinos del pueblo. Otros creen que no está bien. Esto es muy pequeño”.

Cree que si lograsen gobernar “lo haríamos muy bien. Lo tengo clarísimo porque llevamos a gente que sabe cómo gobernar y gestionar un ayuntamiento: somos abogados, directivos de bancos... y hay personas que tienen experiencia en el gobierno de otros ayuntamientos”. Las urnas dirán. 

El precedente de Almendros, en Cuenca

El caso de Albalate de Zorita no es el único en el que el hartazgo vecinal termina por condicionar unas elecciones municipales. En 2019, en la provincia de Cuenca la proliferación de macrogranjas porcinas llevó algunos los vecinos del municipio de Almendros a tomar partido.

Creyeron que la manera de parar la instalación de una explotación intensiva de cerdos en la pequeña localidad era presentándose a las elecciones. Lo hicieron y ganaron hace cuatro años. Hoy gobiernan en este pueblo de poco más de 200 habitantes y vuelven a presentarse a las elecciones del 28 de mayo.

síguenos en Telegram

Etiquetas
stats