Registrado un brote de COVID-19 en Tarazona de la Mancha en el seno de una familia que está aislada

El Ayuntamiento de Tarazona de la Mancha, en Albacete, ha recibido comunicación de la Delegación de Sanidad de la Junta en esta provincia acerca de la aparición de un brote de COVID-19 en el municipio. 

Y es que a los dos casos positivos que se comunicaron hace unos días, según ha publicado el Consistorio a través de sus redes sociales, se han sumado otros tres más, dentro de la labor de rastreo realizado por el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM). 

El alcalde, Miguel Zamora, ha explicado que la situación está “controlada afortunadamente” y espera que “en los próximos días se puedan dar las altas epidemiológicas”. 

Fuentes de la Consejería de Sanidad consultadas por eldiarioclm.es han confirmado que se trata de un brote detectado en el seno de una familia que permanece aislada y el caso ni siquiera es susceptible de ser comunicado al Ministerio del ramo, según las mismas fuentes. 

Poco después, el director general de Salud Pública, Juan Camacho, remitía un comunicado en el que explicaba que ninguno de los cinco casos detectados ha requerido hospitalización.

Además, “se está procediendo al estudio de los contactos estrechos, 14 ya, adoptando las medidas epidemiológicas que son de rigor en este caso”.

Ayer mismo el consejero de Sanidad, Jesús Fernández, pedía ser “muy cuidadosos al hablar de brotes” y explicaba que solo se considera brote tres o más casos salvo en el caso de las residencias de mayores donde basta con un único caso.

El Ayuntamiento ha pedido a sus vecinos “extremar aún más las precauciones si cabe” porque “nos estamos jugando la vuelta al confinamiento. Todos tenemos la responsabilidad individual de minimizar el contagio”.

Este municipio albaceteño tiene algo más de 6.000 habitantes y se encuentra a unos 40 kilómetros de la capital provincial, Albacete, al límite con la provincia de Cuenca. 

El conocimiento precoz de casos es “una buena noticia”

Camacho ha señalado también que conocer la existencia precoz de casos con COVID-19, en estos momentos de pandemia, “es de por sí una buena noticia, ya que estamos en disposición de vigilarlos y estudiarlos, para controlarlos de manera exhaustiva”.

El responsable regional de Salud Pública ha explicado que, en el escenario previo de transmisión comunitaria mantenida, toda la sociedad era el mismo brote y que ahora  “el hecho de que actualmente podamos individualizar y aislar los casos, ya implica no sólo un mayor nivel de conocimiento de las circunstancias de la epidemia, sino la focalización de los casos, lo que nos permite su individualización y control selectivo”.

El director general también ha detallado que hay brotes que se consideran activos y otros brotes inactivos. Estos últimos son aquellos donde el último caso registrado se producía hace más de 14 días.