El osezno hallado en León evoluciona de forma “favorable” tras diez días de cuidados intensivos
Un osezno hallado en estado crítico en un camino de la localidad leonesa de Colinas del Campo de Martín Moro Toledano por agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León el pasado sábado 22 de mayo evoluciona de forma “favorable” tras diez días de cuidados intensivos en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) de la Junta.
La Administración autonómica ha explicado que durante su estancia en el centro el animal ha experimentado una “clara mejoría, si bien todavía presenta secuelas del fuerte traumatismo recibido” y equipo de veterinarios va a seguir monitorizando al esbardo para ver su evolución.
En los primeros días de su llegada al CRAS se encontraba en estado crítico con pronóstico reservado, ya que presentaba estupor y reflejos disminuidos y, conforme han pasado los días, ha mostrado desde periodos de alerta ocasionales hasta encontrarse atento por completo con respuesta a estímulos ambientales que le rodean, si bien aún se tienen dudas respecto a su visión, ya que presenta estrabismo y ausencia de reflejos pupilares.
A finales de la semana pasada comenzó a incorporarse sobre las extremidades posteriores e incluso llegó a poder mantener el equilibrio en estación por cortos periodos de tiempo, hasta que ha conseguido caminar, correr y trepar, aunque con “poca coordinación”.
Por el momento se encuentra aislado por completo en las instalaciones del CRAS de Valladolid, se alimenta por sí solo y muestra un comportamiento “propio” de ejemplares de su edad.
Sin embargo, la Junta ha advertido que, aunque ha presentado una “mejoría y ya se encuentra fuera de peligro, aún es necesario continuar valorando al ejemplar y realizar pruebas diagnósticas para poder determinar el pronóstico de las lesiones que presenta”.
En los próximos días, y una vez realizadas nuevas pruebas diagnósticas complementarias, será trasladado a una instalación específica para osos pardos en el Centro de Recuperación de Fauna en Villaescusa, en colaboración con el Gobierno de Cantabria.
El objetivo es poder realizar un seguimiento “exhaustivo” y que continúe su desarrollo de manera normal, en condiciones de “mínima intervención humana”.
Si la evolución es favorable y el ejemplar es apto para su reintroducción al medio natural, se le trasladará a las instalaciones para la aclimatación de osos pardos que tiene la Junta en la finca de Valsemana, en la provincia de León, en condiciones de semilibertad, de manera que seguiría las experiencias de las oseznas Saba y Éndriga, que fueron reintroducidas con éxito tras su paso por estas instalaciones.
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