La Fiscalía rechaza el último intento de Dani Alves para salir de prisión al persistir el riesgo de fuga
Sin sorpresas. La Fiscalía de Barcelona se ha opuesto a dejar en libertad provisional al futbolista Dani Alves, como su defensa pidió la semana pasada, al considerar que podría fugarse al extranjero para eludir su juicio por agresión sexual en España.
Según han informado fuentes fiscales, este martes el Ministerio Público ha informado en contra de la última solicitud de libertad provisional de Alves, quien permanece desde el pasado 20 de enero en la cárcel acusado de agresión sexual. La instrucción del caso está a punto de finalizar, pero la fiscal del caso no ve motivos que difuminen el riesgo de fuga.
No ha servido para modificar el criterio fiscal el último y definitivo cambio de versión de Alves. Para fundamentar su petición de libertad, el futbolista pidió prestar declaración ante la jueza y reiteró que tuvo sexo consentido con la denunciante, además de explicar sus primeras mentiras sobre lo ocurrido como un intento de ocultar los hechos a su esposa.
En su primer intento para salir de prisión, la Fiscalía y la defensa de la denunciante ya expresaron que persistía riesgo de fuga en el futbolista. La Audiencia de Barcelona también consideró que la cárcel era la única medida para evitar que el jugador huyera.
Al contrario de lo que alegaba la defensa de Alves, el tribunal recalcó el pasado mes de febrero que el jugador presenta un “elevado riesgo de fuga” vinculado a dos elementos: la elevada pena que podría imponérsele por agresión sexual (alrededor de diez años de cárcel) así como a los “severos indicios de criminalidad” contra él y su “abultada capacidad económica”, que le permitiría huir de España “en cualquier momento”.
Destacó el tribunal la falta de arraigo actual de Alves en España y en Barcelona, si bien entre los años 2008 y 2016 sí lo tenía porque jugaba en el Barça. Haberse casado con una española y tener casa en Esplugues no le devuelven ese arraigo, apostillaron los jueces.
Según el tribunal, “nada impediría” que Dani Alves saliera de España por “vía aérea o marítima o incluso terrestre sin documentación” para llegar a su país de origen, Brasil, a sabiendas de que no sería entregado a España ni siquiera mediante órdenes internacionales de detención, ya que no existe tratado de extradición entre ambos países.
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