La Generalitat ofrece los puertos de su competencia para el desembarque del Aquarius
El president de la Generalitat, Quim Torra, ha ofrecido este martes los puertos sobre los que la Generalitat tiene competencias para que al Aquarius pueda atracar. Tras la negativa del Gobierno central a permitir la llegada del barco, que en estos momentos se encuentra cargado con 141 personas rescatadas y sin puerto de destino, el Govern ha ofrecido los puertos que no están gestionados por la autoridad estatal sino por la propia Generalitat, como son los de Palamós, Vilanova o Sant Carles de la Ràpita.
El gesto de Torra responde a la negativa del Gobierno central a abrir sus puertos para este barco. La administración autonómica catalana, por su parte, tiene bajo su jurisdicción una veintena de puertos, que se gestionan desde la entidad Ports de la Generalitat, aunque no tiene competencias en fronteras, aduanas o extranjería. De ser aceptada la oferta del president, la posible llegada del barco abriría un nuevo conflicto competencial entre administraciones.
Desde el Gobierno aseguran que, con las competencias de las que dispone Catalunya, la Generalitat puede permitir a un barco atracar en sus puertos. Ahora bien, recuerdan que la entrada en aguas españolas, para una nave de bandera extranjera como es el Aquarius, es competencia de la Capitanía General, es decir, del Ministerio de Fomento. Como también es competencia estatal el desembarco de pasajeros de nacionalidad no española, un asunto de fronteras que debe ser autorizado por Interior.
El barco de rescate Aquarius, operado por las organizaciones SOS Mediterranée y Médicos Sin Fronteras., se encuentra desde hace varios días en el mar, cerca de la costa de Tunez, cargado con 141 personas rescatadas y a la espera de encontrar algún puerto de destino. Italia y Túnez se han negado a abrir sus puertos.
Pese a que el Gobierno central ya acogió el barco en junio pasado, en Valencia, en esta ocasión el Gobierno de Sánchez también se ha negado a recibir al barco, asegurando que “los puertos españoles no son los más seguros”. La ciudad de Barcelona sí se ha ofrecido para acoger al barco, pese a que el Ayuntamiento no dispone de competencias sobre ningún puerto.
Por su parte, desde Puertos de la Generalitat estudian ya fórmulas con las que podría producirse un desembarco del Aquarius. Una de las mayores dificultades es que, a diferencia de los puertos del Estado en Catalunya, como son el de Barcelona o Tarragona, los puertos de la Generalitat son más pequeños y de capacidad reducida, lo que podría complicar la operación de llegada. Mientras, el Aquarius cuenta con 77 metros de eslora y podría necesitar desembarcar tan pronto como llegase al puerto.
