El jefe de la oficina de Puigdemont acusa al juez de la trama rusa de crear una causa “fantasiosa”
El jefe de la oficina de expresident de Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay, ha arremetido con dureza contra el juez de Barcelona Joaquín Aguirre, al que ha acusado de llevar a cabo una investigación “prospectiva” y “fantasiosa” sobre la trama rusa del procés y la macrocausa Voloh.
La defensa de Alay, que ejerce el penalista Gonzalo Boye, ha recurrido la decisión del juez de prorrogar la investigación de otra de las múltiples piezas del caso Voloh, de menos resonancia mediática que la de la trama rusa pero que también afecta al asesor de Puigdemont.
Se trata de la pieza separada 7 del caso (el juez este lunes también prorrogó la 2, la relativa a la trama rusa), en la que Alay está, según la defensa, desde el 3 de abril de 2023 procesado por supuestamente pedir a un mosso d'esquadra que mirara en la base de datos policial.
La defensa puede acreditar que recibió el auto de procesamiento de Alay. Por contra, a la Fiscalía no le consta que el juzgado dictara el auto de procesamiento del asesor de Puigdemont y de dos mossos d'esquadra, según han explicado fuentes fiscales.
La defensa hace hincapié en la indefensión que le supone la decisión del juez de dividir el caso Voloh en varias piezas separadas “descontroladas” y de prorrogar una de ellas que ya habría cerrado en 2023, pese a lo cual la Fiscalía todavía no ha presentado escrito de acusación.
La defensa de Alay tilda de “improcedente, ilegal e irrisorio” el dictado del auto de este lunes que prorrogó seis meses más las pesquisas, y lo vincula con la “vulneración de derechos fundamentales” que, a su juicio, sufre el asesor de Puigdemont desde el inicio del caso.
“Solo una instrucción prospectiva, carente de cualquier base legal y constitucional, puede llevar ya 7 años sin que se haya alcanzado a nada razonable, mucho menos a algo serio y que no resulte del todo fantasioso”, remacha el escrito.
En otra de las piezas que acumula el caso, el juez reiteró este lunes que considera que Puigdemont y miembros de su entorno como Alay mantuvieron “estrechas relaciones personales” con políticos de extrema derecha alemana e italiana y con Rusia, que según el instructor estuvo dispuesta a apoyar “económica y militarmente” la independencia de Catalunya 2017 como vía para desestabilizar a Europa.
Un día antes de la votación en el Congreso de la ley de amnistía, el instructor decidió prorrogar las pesquisas del caso pese a no apuntar en su resolución ningún elemento nuevo. Todos los contactos rusos en los días críticos de 2017 ya los habían relatado en el juzgado exdirigentes como Víctor Terradellas o Elsa Artadi, que restaron relevancia y desvincularon del encargo de los mismos a Puigdemont.
La defensa también menciona en su escrito una entrevista que el juez Aguirre ha concedido a la televisión alemana sobre el caso Voloh y la trama rusa, un hecho inusual en España en los casos bajo investigación. A juicio de la defensa, los “compromisos mediáticos” del juez le han llevado a dictar “resoluciones que poco o ningún apego a la legalidad tienen”, en referencia a su decisión de prorrogar la investigación de la trama rusa.
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