Manuel Valls asegura que atribuirle la expulsión de gitanos en Francia son “fake news”
Manuel Valls no quiere verse asociado a la expulsión de gitanos en Francia durante su mandato como ministro del Interior mientras se postula para lograr la alcaldía de Barcelona. El candidato, que encabeza por ahora la plataforma Barcelona Capital Europea con el único apoyo de Ciudadanos, lo ha calificado de “fake news”, aunque su gobierno devolvió, sobre todo a Rumanía, cientos de gitanos que vivían en campamentos y chabolas principalmente durante el año 2013.
El exprimer ministro francés ha elogiado el pueblo gitano, que ha asegurado que “forma parte de la cultura francesa”, y ha centrado el foco solo en el “problema” de los de origen rumano, que ha justificado que “vivían en condiciones indignas y espantosas, para ellos mismos y para el vecindario”. “Nadie puede hacerme pasar por racista”, ha continuado Valls, que ha añadido que quienes lo hacen son los mismos que le dicen a Inés Arrimadas que “vuelva a su casa”.
El exprimer ministro francés ha celebrado una rueda de prensa este lunes para presentar su libro, 'Barcelona, vuelvo a casa', en el que aborda su relación con la capital catalana, muy vinculada a su entorno familiar y a las visitas a la casa del barrio de Horta, y también su trayectoria política. Desde su papel como asesor del socialista Michel Rocard, al que siempre señala como referente, hasta su paso por la alcaldía de Evry o el Ministerio del Interior del país galo.
Este mismo lunes tiene previsto presentar el libro, al que ha contribuido uno de sus colaboradores, Fernando Carrera, en el Auditorio de Barcelona, junto al escritor Mario Vargas Llosa. El intelectual peruano conoce a Valls de haber participado juntos en manifestaciones contra la independencia y en un acto de Ciudadanos durante la campaña electoral del 21 de diciembre en Catalunya.
Valls no ha dado todavía pistas de qué fórmula usará su candidatura, Barcelona Capital Europea, para integrar a Ciudadanos, de momento el único partido que le apoya, pese a que él se reivindica como “independiente”. Tampoco ha revelado ningún nombre de la lista electoral que él encabezará, pero ha confirmado que aparte de variedad ideológica y territorial, habrá figuras de Ciudadanos y también “socialistas”.
Sobre su permanencia en el Ayuntamiento de Barcelona si no gana las elecciones, ha insistido que mantendrá el acta de concejal, algo que descartó en una entrevista en una cadena francesa pero que rápidamente corrigió ante las críticas recibidas.
La inseguridad, su arma contra Colau
En su discurso de oposición a la alcaldesa Ada Colau, Valls sigue abonado a la idea que Barcelona se ha “deteriorado” en los últimos años, en su opinión, debido a la inacción del gobierno municipal ante la inseguridad. “Es una ciudad con exceso de incidentes de inseguridad que la máxima autoridad no ha sabido controlar”, ha expresado el candidato, que ha asegurado que esta no es solo su valoración sino de “observadores y analistas globales” y del resto de barceloneses.
Valls ha puesto el ejemplo del macrooperativo con 700 Mossos d'Esquadra para desalojar decenas de narcopisos en el distrito céntrico de Ciutat Vella. “No hay soluciones mágicas, pero la voluntad es imprescindible, y yo como alcalde, daré más recursos a la Guardia Urbana y más cooperación a los Mossos”, ha expresado. Acto seguido, el candidato ha incluido también a los manteros como un factor que afecta a la convivencia en la ciudad para lanzar un último ataque a Barcelona en Comú: “Si algo representa Ada Colau es narcopisos y top manta”.