La Generalitat garantiza los salarios de sus proveedores afectados por el coronavirus y retrasará los tributos
El Govern catalán ha aprobado este martes un segundo paquete de medidas económicas para tratar de paliar los efectos de la crisis del coronavirus. Entre las medidas tomadas, la Generalitat ha aprobado garantizar los salarios de los trabajadores de las empresas que suministran al sector público catalán y que se han visto afectadas por cierres durante la crisis del coronavirus, como son servicios de limpieza, de comedor escolar, transporte u obras públicas ya adjudicadas. Además de los salarios, el Govern pagará las pólizas de los seguros de empleo de estos trabajadores.
Con esta medida el Ejecutivo catalán quiere mitigar un alud de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) entre las empresas a las que se han suspendido sus contratos públicos, y que podrían tener problemas para continuar abiertas debido al parón de la actividad. En el mismo sentido, el Govern ha aprobado también aplazar el cobro de los tributos propios, una medida de la que afectará a particulares y empresas pero que, por la propia naturaleza de los tributos de los que dispone la Generalitat, sobre todo beneficiará a las compañías.
A estas medidas se le suma el fondo de 7,5 millones de euros que repartirá entre los autónomos que hayan visto disminuida “drásticamente” su actividad. En total el Govern calcula estos trabajadores en unos 4.500, y entregará subsidios a fondo perdido de hasta 2.000 euros para cada uno de los que puedan acreditar una reducción “drástica e involuntaria” de su facturación respecto a marzo de 2019. Con todo, la cifra de trabajadores afectados corresponde a menos del 1% del total de los autónomos en Catalunya.
Críticas al Gobierno central
Tal y como viene haciendo durante los últimos días, el Govern no ha ahorrado este martes críticas al Gobierno central, a quien acusa de falta de agilidad y de estar tomando medidas insuficientes respecto al confinamiento. Este martes la consellera portavoz, Meritxell Budó, ha vuelto a insistir en aumentar la dureza del confinamiento porque, sin él, “cada hora que pasa” la presión sobre el sistema sanitario es mayor.
El Ejecutivo catalán reclama desde la semana pasada que el confinamiento en los domicilios se acompañe de un cierre de los transportes en Madrid y Catalunya. Además la Generalitat considera que deberían de paralizarse las obligaciones laborales, por lo que recomienda a la ciudadanía que se autoconfine en casa si no tiene obligaciones de fuerza mayor.
El Govern además acusa al Ejecutivo de Pedro Sánchez de falta de agilidad porque, asegura, no le ha dado respuesta a su plan de contingencia que le presentó este lunes y que necesita del visto bueno del Gobierno desde la entrada en vigor del estado de alerta. “Han sido muy rápidos en tomar las competencias en materia de salud y de protección civil, pero sigue lento en hacer frente a la amenaza real, que es el coronavirus”, ha criticado Budó.
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