Mas, ante la comisión de fraude: “Lo que contó Pujol nada tiene que ver con CiU, el Govern o conmigo”
Artur Mas ha comparecido esta tarde en la comisión sobre el fraude para explicar su papel en los Gobiernos del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol. Durante su comparecencia, el president ha afirmado, por enésima vez, que la confesión de Pujol es un tema de “estricta esfera familiar” y lo ha desligado de su actividad política como president. “Lo que contó Pujol nada tiene que ver con CiU, el Govern o conmigo”, ha asegurado Mas, que ha especificado que conoció la confesión del expresident la misma mañana en que la hizo pública, el 25 de julio del año pasado, cuando Pujol se reunió con él.
Mas ha acudido a la comisión Pujol sacando pecho sobre las medidas de “regeneración y transparencia” impulsadas por su Gobierno. “Hemos mejorado sustancialmente la transparencia en el último año y queremos continuar siendo líderes en ello”, ha explicado, después de referirse a la Ley de Transparencia, aprobada el pasado año, y el portal de la transparencia, donde aparecen los sueldos, remuneraciones y cambios patrimoniales de altos cargos y personal de confianza de la Generalitat.
Además, el president ha hecho una defensa cerrada de su actuación en el caso de las ITV y de su intervención ante empresas en proceso de deslocalización. “Hemos actuado para salvar los puestos de trabajo que peligraban y lo hemos hecho con la cabeza bien alta porque es nuestra labor”, ha asegurado Artur Mas, y ha explicado que Gobiernos anteriores lo hicieron igual y CiU lo apoyó. El president se refería veladamente a la acusación del fiscal contra Oriol Pujol, quien asegura que actuó como conseguidor entre Mas y empresarios para que el president interviniese.
El actual president fue conseller entre el año 1995 y 2003, durante dos legislaturas seguidas, cuando ocupó tres carteras: la de Política Territorial y Obras Públicas, entre 1995 y 1997; la de Economía y Finanzas, entre 1997 y 2001; y la de Conseller en Cap, entre 2001 y 2003. Su predecesor en la consellería económica fue Macià Alavedra, detenido en 2009 y acusado de cobrar comisiones en el caso Pretoria.
El president de la Generalitat había sido reclamado hasta en cuatro ocasiones a la comisión del fraude, pero ERC siempre había bloqueado su comparecencia. Los de Junqueras cambiaron de criterio poco después de reafirmar su pacto de legislatura con CiU, por el que Mas se comprometió a celebrar elecciones el próximo 27 de septiembre y los republicanos accedieron a aprobar los presupuestos. Una vez atado el acuerdo, el grupo de Esquerra forzó la presencia de Mas en la comisión Pujol, algo que sentó mal en las filas convergentes. El conseller de presidencia, Francesc Homs, llegó a acusar a ERC de ir contra las plebiscitarias al llamar al president a la comisión de investigación.
