Los Mossos detienen por organización criminal a nueve independentistas por causar disturbios
La investigación de los Mossos d'Esquadra contra los disturbios que se sucedieron en varias protestas independentistas contra el Consejo de Ministros de Barcelona o la visita del rey Felipe VI al Mobile World Congress ha culminado con la detención de nueve activistas, a los que la policía catalana acusa de conformar una organización criminal para generar altercados.
Los nueve detenidos, algunos de ellos militantes de los Comités de Defensa de la República (CDR) o de la organización de la izquierda independentista Arran, fueron detenidos este miércoles y este jueves el juez de guardia les ha dejado en libertad. Más allá de los habituales delitos de desórdenes públicos o daños, la novedad del caso es que la policía catalana también sostiene que los arrestados podrían haber cometido un delito de organización criminal, castigado con hasta ocho años de cárcel.
“Es absolutamente inverosímil lo que dibujan los Mossos d'Esquadra y solo se puede entender en una lógica represiva a las puertas de la sentencia del Tribunal Supremo”, ha señalado el letrado de varios detenidos, Xavier Monge, del colectivo Alerta Solidària. Los arrestados solo han contestado a las preguntas de su defensa antes de quedar en libertad con cargos.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), el caso no se investiga como una sola macrocausa, sino que nueve juzgados distintos se han hecho cargo de la investigación, uno por cada jornada de protestas. Según fuentes jurídicas, la división del caso en varios juzgados implica que los jueces no acogen, por ahora, la tesis de los Mossos sobre la presunta organización criminal.
El periodo temporal de los disturbios abarca desde los altercados que se produjeron durante el Consejo de Ministros de Barcelona del 21 diciembre de 2018 a los disturbios tras la manifestación del 1 de mayo de este año. Además, también se investigan los cortes de tráfico durante la visita del rey en febrero por el Mobile World Congress.
Por su lado, los CDR han criticado con dureza la operación y han acusado al Govern de promover una “redada represiva” contra el independentismo. “Ni los CDR ni la izquierda independentista son organizaciones criminales. La organización criminal es el Govern que nos señala y la justicia que dispara”, han proclamado los CDR en un comunicado.
