Yo no quiero seguir pagando el escaqueo fiscal, ¿tú?
¿Somos realmente conscientes de lo que implica el caso de los Papeles Pandora, la investigación realizada por el ICIJ (Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación)? Estamos hablando de la mayor filtración de documentos privados de despachos de abogacía que gestionan sociedades offshore hasta el momento. Esto pone de manifiesto que existe una realidad, de la que la mayoría de personas somos ajenas, donde una élite, compuesta mayoritariamente por hombres, manejan enormes cantidades de riqueza y poder en todo el mundo, a costa de nuestras vidas, sin dar cuentas de ello y sin asumir ninguna responsabilidad.
Jefes de Estado, jefes de gobierno, políticos, jefes de organizaciones internacionales, artistas, deportistas, escritores y grandes multinacionales que se benefician de forma indirecta de los servicios públicos de nuestro país, ya sea mediante el uso de infraestructuras como carreteras, vías de tren y aeropuertos o el empleo de mano de obra, cuya formación y salud corre a cargo del Estado. Personas y empresas que creen que están por encima del resto y que pueden evadir sus impuestos sin ningún tipo de repercusión. Cosechan sus fortunas aquí, pero se llevan los frutos fuera. De esta forma, los paraísos fiscales cuestan a los Gobiernos de todo el mundo 427 mil millones de dólares, aproximadamente unos 367.220 millones de euros cada año.
Es una cantidad ingente de dinero que “desaparece” en las cloacas fiscales y que, por tanto, no puede invertirse en fondos contra la violencia de género y ayuda a las víctimas, guarderías públicas, atención a la dependencia, gestión de los trabajos de cuidados, centros de día públicos para personas mayores, mejor atención sanitaria, desarrollo de la industria tecnológica, recursos para la investigación científica, mejores sueldos públicos, pensiones, programas de empleo juvenil, construcción de escuelas, ayuda a las víctimas de trata, servicios de inserción laboral efectivos, una renta básica universal que permita vivir dignamente, mejor atención a la salud mental, etc. Al final, se trata de la calidad de vida de millones de personas, como tú y como yo, en todo el mundo.
En 2017, según el Informe país por país, 22 multinacionales españolas pagaron un impuesto de sociedades medio del 1,3% de su beneficio. Por su parte, el porcentaje de retención medio de las pensiones de jubilación es del 7%, un/a docente de bachiller paga un tipo del 17% en concepto de IRPF y una persona autónoma de un 19% a un 37%. Una persona jubilada o trabajadora paga más impuestos que una multinacional.
Los impuestos son la principal fuente de ingresos de un país, por lo que todo lo que las grandes fortunas y multinacionales no pagan lo tenemos que pagar tú y yo, sí, con ese sueldo que nos llega justito para pagar alquiler, facturas y pasar el mes. En España las familias aportamos el 84% de lo que se recauda a través de impuestos, y ni siquiera todas pagamos y nos beneficiamos por igual, ya que impuestos como el IVA, el IRPF o el IBI afectan más a las mujeres.
El debate sobre política fiscal se está imponiendo a nivel global porque el hecho de que unos pocos se enriquezcan a costa de la mayoría es injusto. Urge establecer un impuesto que grave la riqueza y el capital, que las grandes fortunas y multinacionales paguen los impuestos que les corresponden. Ser patriota consiste en contribuir a que tu país pueda desarrollarse y garantizar que todas las personas tengan lo mínimo para vivir dignamente.
Desde Oxfam Intermón, dejaban claro que “En estas guaridas es donde están todos los servicios públicos que nos faltan, nuestros hospitales y centros de salud que tanto hicieron falta durante los momentos más duros de la crisis sanitaria provocada por la COVID” y han planteado una serie de medidas al gobierno español para acabar con los paraísos fiscales.
Yo no quiero seguir pagando el escaqueo fiscal, ¿tú?
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