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Las empresas del Ibex se lanzan de lleno a las tareas de lobby en la UE

Parlamento Europeo.

Antonio M. Vélez

El gasto declarado por las principales compañías cotizadas españolas para presionar a las instituciones europeas en favor de sus intereses va en aumento, a medida que las empresas del Ibex 35 se animan a inscribirse en el registro de lobistas de la UE. En 2013, el último ejercicio disponible, estas empresas declararon un gasto directo (sin contar lo desembolsado por asociaciones y grupos de presión en los que participan de forma indirecta) de 7,28 millones de euros para intentar influir en los europarlamentarios y comisarios europeos. 

La cifra supone un incremento muy significativo (del 129%) con respecto a 2011, cuando el gasto declarado se quedó en apenas 3,17 millones y sólo había cinco compañías inscritas en ese registro. Actualmente ya son mayoría las compañías del selectivo que están en él: 18 sobre un total de 34 empresas (sin contar ArcelorMittal, que tiene su sede en Luxemburgo).

El registro europeo, en el que hay inscritas más de 6.500 empresas, asociaciones (públicas y privadas), ONG, sindicatos, consultoras y profesionales del lobby, tiene carácter voluntario, a diferencia del que gestiona el Senado de EEUU. En Europa están disponibles datos de las empresas que están dadas de alta en él, pero no de todos los lobistas. En España la opacidad es todavía mayor, ya que ni siquiera cuenta con una herramienta de estas características, que los propios profesionales del lobby creen necesario adoptar.

En los últimos meses, la lista de empresas del Ibex que se ha dado de alta en el registro europeo ha crecido considerablemente. En el último año han aflorado ocho nuevas, la mayoría, bancos. La última en llegar ha sido Amadeus (se inscribió el pasado 22 de diciembre), pero antes lo hicieron Banco Popular y Santander (en noviembre pasado), Banco Sabadell y Bankinter (octubre), BBVA y Abertis (febrero de 2014) y Ferrovial (hace un año).

En total, las 18 empresas registradas tienen contabilizadas a 90 personas como “participantes en actividades que entran en el ámbito de aplicación del Registro de Transparencia” de la UE, pero sólo cuentan con once personas con acreditación para acceder a los edificios del Parlamento Europeo. De esas 18 empresas, hay siete que no tienen a nadie acreditado para visitar los despachos de los parlamentarios europeos.

Un hijo del ministro de Exteriores como lobista

Telefónica es la empresa del Ibex que más se gasta, una de las pocas que aporta una cifra exacta (2.439.500 euros en 2013) y la que más tiempo lleva inscrita en el registro (se apuntó cuando se creó, en junio de 2008). Con un gasto inferior al que declara, por ejemplo, Microsoft (entre 4,5 y 4,75 millones en 2013), tiene once empleados dedicados a tareas de lobby ante las instituciones europeas. Y una de las cuatro “personas acreditadas para acceder a los edificios del Parlamento Europeo” que trabajan para la compañía es José Manuel García-Margallo Vallterra, hijo del ministro de Exteriores, al que Telefónica fichó en 2012.

A continuación figura Acciona, con entre 2 millones y 2,25 millones de euros de gasto en 2013. El grupo de construcción y energías renovables de la familia Entrecanales lleva inscrito en el registro de la UE desde julio de 2013 y cuenta con tres personas dedicadas a actividades de lobby. La siguiente por gasto es Iberdrola (entre 600.000 y 700.000 euros en 2013, igual que en 2011), que se inscribió en el registro en febrero de 2012 y tiene a cinco lobbistas ante la UE y a dos personas con acreditación para acceder al Parlamento Europeo.

Le sigue BBVA (entre 500.000 y 600.000 euros en 2013), cuya “persona jurídicamente responsable” no es su presidente, Francisco González, sino José Manuel González-Páramo, exmiembro del Comité Ejecutivo y del Consejo del Banco Central Europeo (BCE), al que fichó como consejero ejecutivo en mayo de 2013; después figuran Santander (entre 350.000 y 400.000 euros de gasto en 2013) y Repsol, Indra y Mediaset, las tres con entre 300.000 y 350.000 euros.

A continuación está Ferrovial, con un gasto declarado de entre 150.000 y 200.000 euros y la particularidad de tener hasta 18 personas dedicadas a actividades de lobby ante la UE y ninguna acreditada para acceder al Parlamento Europeo. Le siguen Amadeus (150.000 euros en 2013), Banco Popular (100.000 euros) Endesa y Gas Natural-Fenosa (entre 50.000 y 100.000 euros cada una) y Enagás (menos de 50.000 euros).

Red Eléctrica de España y Abertis todavía no han publicado datos de gasto en 2013. En 2012 fue de 270.000 euros y 100.000 euros, respectivamente. Y dos empresas inscritas en el registro no declaran ningún gasto: Banco Sabadell y Bankinter. Las catorce que todavía no aparecen registradas son Abengoa, ACS, BME, Criteria, DIA, FCC, Gamesa, Grifols, IAG, Inditex, Jazztel, OHL, Sacyr y Técnicas Reunidas.

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