El Icex dio una subvención irregular a la mujer de un alto cargo de Fomento
La esposa del presidente de la empresa estatal Ineco y ex directivo del Instituto de Comercio Exterior (Icex), Isaac Martín, vulneró la normativa de incompatibilidades al obtener el año pasado una subvención del Icex a una empresa que ella administraba sin la preceptiva autorización, pese a ser funcionaria en el Ministerio de Economía, del que depende ese organismo público.
La subvención, un programa de apoyo a la internacionalización para pymes, se convocó en una resolución de diciembre de 2016, cuando Martín era director general de Internacionalización de la Empresa en el Icex. Se otorgó a la textil Gunes Bulut SL, que tiene como administradora única a su esposa, la funcionaria Natalia Cabrera.
La resolución en la que consta la ayuda es del 8 de noviembre, pero su concesión, como reconoce el presidente de Ineco, data de julio. Martín admite que entonces y desde el año 2012, su cónyuge simultaneó su trabajo en Economía con la administración de su empresa sin la preceptiva autorización de compatibilidad.
Cabrera, que no ha querido atender a eldiario.es, “está en excedencia voluntaria por interés particular desde agosto de 2017”, según confirma la Secretaría de Estado de Comercio, a la que está adscrita. Debió obtener ese permiso expreso para desarrollar actividades privadas, según la Ley 53/1984, de incompatibilidades del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas. Además, no podía optar a esa subvención estando en activo si no tenía esa autorización.
Según el artículo 13 de la Ley de Subvenciones, “no podrán obtener la condición de beneficiario” de ayudas estatales las empresas administradas por personas incursas en las incompatibilidades recogidas en la citada ley de 1984.
Martín, que actualmente es alto cargo del Ministerio de Fomento como presidente de Ineco, una consultoría pública de ingeniería civil cuyo accionariado se reparten Enaire, Adif y Renfe, reconoce que su esposa “ha cometido errores”. Pero, preguntado por si es ético cobrar una subvención en un caso como este, recalca que “en ningún momento hubo coincidencia temporal” entre la tramitación de la subvención y su posición como alto cargo del Icex.
Su esposa pidió la ayuda en mayo de 2017, cuando él ya estaba en Ineco, “y no es casual” que así fuera. “Yo no concedía ninguna ayuda; las firmaba mi jefe, el consejero delegado”, añade.
El Icex depende del Ministerio de Economía, del que ambos cónyuges son funcionarios desde 1999. El presidente de Ineco es técnico comercial y del Estado y su esposa, diplomada comercial. Cabrera ha sido jefa de Sección en la Subdirección General de Política Comercial con los países mediterráneos, África y Oriente Medio de la Dirección General de Comercio Internacional. Cuando montó la empresa en 2010, disfrutaba de otra excedencia, que mantuvo hasta que en 2012 Luis de Guindos nombró a Martín alto cargo del Icex y el matrimonio volvió a España.
Según Martín, su esposa “va a renunciar a todos los gastos que hubiese presentado con fecha anterior al 1 de septiembre”, cuando todavía estaba en activo, para cobrar esa ayuda. El Ministerio de Economía señala que no tenía constancia de esta situación y la está “analizando”. El Icex se remite a Economía, mientras que el Ministerio de Fomento no ha hecho comentarios.
Asesoramiento personalizado
El programa al que se acogió la empresa, ICEX-NEXT, está destinado al “apoyo a la internacionalización de la PYME española no exportadora o exportadora no consolidada”. Dotado con un máximo de 4,5 millones de euros, concede ayudas de hasta 10.400 euros por empresa, aunque su principal atractivo no es económico. Las elegidas reciben durante año y medio hasta 45 horas de asesoramiento personalizado en materia de internacionalización de “expertos en distintos ámbitos” y análisis de su modelo de negocio en los mercados de destino.
El principal incentivo económico es un máximo de 9.800 euros para “gastos de asesoramiento personalizado y gastos de promoción y de personal”, según las bases de la convocatoria. El Icex cofinancia ese gasto al 50% durante año y medio, hasta 19.600 euros. La ayuda cubre gastos como investigación de mercados, material promocional, “participación como expositores en ferias”, “viajes de prospección y comerciales”, protección de propiedad intelectual, certificaciones y homologaciones, “otros gastos de internacionalización” o “contratación de un colaborador para la ejecución del Plan de Internacionalización”.
Gunes Bulut es una expresión que significa “nube de sol” en turco, idioma con el que el matrimonio está familiarizado ya que el hoy presidente de Ineco fue consejero económico y comercial jefe en la embajada de España en Ankara, entre otros destinos.
La empresa opera bajo la marca de ropa infantil Stay Little, que Cabrera registró en 2010. En su web, ofrece sus productos en 56 países de los cinco continentes. En 2016, último ejercicio disponible, tuvo una cifra de negocios de 84.157,99 euros y beneficios de 7.407,24 euros. Desde su creación hasta ese año ha facturado unos 307.000 euros.