El Gobierno cerrará la oficina comercial en Guinea Ecuatorial por la “pérdida de interés” de las empresas españolas
El Gobierno prepara el cierre de la oficina comercial de España en Guinea Ecuatorial, única excolonia española en África Subsahariana, ante la “creciente pérdida de interés” de las empresas españolas por este destino, que atraviesa una grave crisis económica y dirige con mano de hierro el septuagenario dictador Teodoro Obiang desde 1979.
El cierre de la oficina ya ha sido comunicado internamente al personal del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo a través de un correo electrónico remitido por el subdirector general de Oficinas Económicas y Comerciales en el Exterior, Eduardo Euba, en el que informa de la decisión de la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, de “tramitar un real decreto para acometer la apertura de una nueva oficina en Adis Abeba”, Etiopía, “cerrando la actual” en Malabo, capital guineana.
La memoria justificativa firmada por Méndez y fechada el pasado 17 de junio explica que la complicada situación económica de Guinea, donde se prevé una contracción del PIB superior al 8% en 2018, ha propiciado un “descenso” de las consultas de las empresas españolas y una “creciente pérdida de interés” ante la “profunda recesión” que sufre el país.
En febrero pasado, la Oficina Económica y Comercial de España en Malabo ya advertía de la “delicada” situación económica de esta potencia petrolera, donde “el FMI estima que la recesión que empezó en el año 2013 se prolongará hasta al menos el 2021”, y recordaba el “elevado” nivel de corrupción de la plutocracia de Obiang. En las últimas elecciones de 2017, el partido del jefe de Estado africano que más tiempo lleva en el poder obtuvo 99 de los 100 diputados y la totalidad de los 55 senadores.
Guinea, que según el Índice Doing Business del Banco Mundial ocupa el puesto 177 de 190 países respecto a la facilidad para hacer negocios en 2019, es percibido, según Transparencia Internacional, como uno de los lugares más corruptos del mundo (ocupa el puesto 172 de un total de 180 países). Sin legislación sobre compras públicas, permite a sus ministros y otros altos cargos participar en empresas que contratan con el sector público e incluso con su mismo ministerio.
Cabe recordar que destacados exministros socialistas como Miguel Ángel Moratinos y José Bono han tratado en el pasado de hacer valer sus contactos con el régimen para abrir negocio a empresas españolas. La creación de la oficina de Malabo se aprobó por Real Decreto en noviembre de 2007.
“Diferimiento”
Para poner en marcha el cierre de Malabo y el desembarco posterior en Etiopía, añade el correo remitido por Euba a personal del ministerio, se va a tramitar el “diferimiento por tres meses”, hasta el 30 de noviembre, del cese del actual consejero comercial en Guinea, José Blas Hernández Delgado, con el objetivo de que pueda “dar cobertura” a la nueva consejería en Etiopía.
Hernández, técnico comercial del Estado, es compañero de promoción de los exministros Luis de Guindos y José Manuel Soria y cumplía su mandato de dos años en Guinea el 31 de agosto. Industria confirma que “se ha aplazado 3 meses la finalización del consejero en Guinea por razones de servicio” y asegura que “la provisión de la plaza en una nueva Consejería lleva un proceso complejo que todavía no se ha iniciado y que se realizará conforme a la normativa vigente”.
El ministerio del que depende la red de Oficinas Económicas y Comerciales de España señala que el decreto de 1998 que las regula “contempla la creación o supresión de una nueva Oficina Económica y Comercial mediante Real Decreto, y esta Secretaría de Estado de Comercio está valorando la posible creación de una nueva Oficina en Adís Abeba, que en su caso se tramitará respetando escrupulosamente el marco legal vigente, tanto en lo relativo a la creación de la nueva unidad administrativa, como respecto a la provisión de su dotación de puestos de trabajo de personal funcionario y laboral”.
“Se está valorando responder a las condiciones cambiantes del entorno macroeconómico y de los negocios en la región de África Subsahariana, una de las regiones del mundo con mayor dinamismo por las peculiaridades de su estructura económica y demográfica. En particular, se pretende responder al ascenso de Etiopía como mercado emergente de especial relevancia”, añade el ministerio.
El informe justificativo de la secretaria de Comercio señala que Etiopía se ha convertido en “epicentro económico” de esa región, “con tasas de crecimiento por encima del 7,5% en los últimos años” y “grandes posibilidades” en sectores como el energético, el agrícola, agroalimentario o el transporte y un “interés creciente” de empresas españolas en actividades como la construcción de viviendas, el textil, los transportes o la energía. Factores todos ellos que “justifican una mayor presencia sobre el terreno de la administración comercial española”.