El Tribunal Supremo lamenta no haber podido pronunciarse sobre las participaciones preferentes después de que el Banco Santander retirara un recurso interpuesto ante la Sala Civil para evitar que sentara jurisprudencia sobre la comercialización de estos productos financieros de riesgo.
“La Sala lamenta que tal decisión del recurrente le impida dictar una sentencia en la que fije criterios jurisprudenciales que sean útiles para resolver estos litigios, así como el tiempo y el esfuerzo empleados”, afirma el tribunal en un comunicado.
El Supremo tenía previsto pronunciarse este jueves sobre una sentencia contraria sobre la venta de estos productos de alto riesgo a un matrimonio de Mahón. El Banco Santander había recurrido esa decisión judicial. Sin embargo, 72 horas antes de que el Supremo dictara jurisprudencia en cuanto a las preferentes, la entidad presidida por Emilio Botín retiró el recurso.
Así, el Banco Santander dio por buena la sentencia de la Audiencia Provincial sobre la demanda de los afectados, que reclamaban al juez que declarase que la venta de preferentes “se hizo ocultando a los compradores el riesgo financiero que comportaba la operación o sin informarles del riesgo”. Por tanto, Santander tiene ahora que aceptar la nulidad de la venta de las participaciones preferentes y la condena a reintegrar a los compradores la totalidad del importe abonado.
El alto tribunal quiso “resolver en pleno este asunto, porque se refiere a un tema de especial sensibilidad en los momentos actuales”, pero la marcha atrás de la entidad lo ha impedido. No obstante, este cambio solo retrasa la llegada de una interpretación jurídica del Supremo, ya que es muy previsible que otras sentencias terminen en este tribunal.