La acumulación de muertes con coronavirus empaña el constante descenso de positivos y hospitalizaciones en Euskadi

Euskadi ha conseguido dominar la cadena de contagios de Covid-19 pero no es capaz de frenar la cifra de fallecimientos, que responden al empeoramiento de pacientes infectados semanas atrás, según muestra la estadística de manera tozuda día sí y día también. Así las cosas, mientras sigue bajando el porcentaje de pruebas de coronavirus que dan positivo (ya están en el 21% los nuevos casos) y continúa en descenso la cifra de nuevos ingresos hospitalarios, el último dato de muertes es de 51 este jueves, el segundo peor día de toda la serie histórica solamente empeorado por los 52 de este miércoles. Son 689 en conjunto.

Bizkaia se lleva la peor parte con 35 decesos en 24 horas (349 en total de 5.182 positivos), son 11 en Gipuzkoa (103 en total de 1.756) y 8 en Álava (237 en total de 2.868). Álava se ha asentado ya en la estadística como el territorio con menos nuevos positivos, menos ingresos hospitalarios y menos muertes después de un duro mes en el cual la incidencia del Covid-19 en relación a su población ha sido elevadísima y muy superior a la del entorno. En la comparecencia telemática de este Jueves Santo de la consejera vasca de Salud, Nekane Murga, se ha querido remarcar que la estadística refleja muertes de personas con test positivo y cualquier causa, sea el Covid-19 la principal o no en el parte de defunción. En relación a una posible cifra negra y que haya más fallecimientos de los conocidos, un asunto que se discute en todo el mundo, las autoridades sanitarias vascas remarcan que la contabilidad intenta ser lo más precisa posible. 

Murga ha destacado como dato positivo que 66 personas menos hayan ingresado y que se hayan liberado otras 8 camas de UCI. Las hospitalizaciones se quedan en 1.485 a las que se suman 118 personas en hoteles (100 en el Hotel Lakua de Vitoria y 18 en el María Cristina de San Sebastián) y medio centenar en la residencia y centro de paliativos San Onofre de Vitoria, vaciado para casos leves. Existe también la hospitalización a domicilio y Murga ha indicado que ha caído también un 8%. El último dato ofrecido aludía a unas 500 personas en esa situación.

En cuanto a los recuperados, son ya 865, si bien Osakidetza pide “cautela”. “Son casos que en su última analítica han dado negativo en ella”, informa el Servicio Vasco de Salud en su informe diario, pero alerta de que es “exigente” con el dato porque es prudente esperar “más días” hasta dar por segura la sanación. Sin embargo, ello contrasta con sanitarios a los que se está enviando a trabajar con una PCR positiva, según ha denunciado el Sindicato Médico. Las altas son 3.645.

Los nuevos positivos en Euskadi son 354 en 24 horas y la cifra de casos registrados se acerca ya a los 10.000. Bizkaia ya ha superado, de hecho, la barrera de 5.000. Son exactamente 9.806 en total. Murga asegura que ello responde a que se están realizando más analíticas que nunca, merced a la llegada de 43.600 test rápidos el pasado fin de semana y enviados por el Ministerio de Sanidad. Su fiabilidad es menor que las PCR que se usaban hasta ahora, pero Euskadi ya dijo que haría una segunda prueba a los negativos para asegurar el diagnóstico. 

Situación crítica en las residencias

Esas nuevas pruebas se están haciendo principalmente en residencias. Ello permitirá en unos días conocer la situación más fidedigna del alcance de la pandemia en estos centros de mayores. Por el momento, según los datos recopilados por este periódico de las diputaciones y del Ayuntamiento de Vitoria -pero que Osakidetza nunca ha facilitado-, en Bizkaia hay 647 positivos (140 trabajadores incluidos), 33 fallecidos y 105 hospitalizados. Los centros afectados son 35. En Álava los casos detecados son 560 (45 trabajadores, pero es un dato incompleto), 88 las personas que han muerto y 38 las ingresadas. Afecta el Covid-19 a una veintena de residencias. En cuanto a Gipuzkoa, suman 344  los positivos, de los que 28 han sido enviados al hospital. Han fallecido 51 personas y la pandemia se extiende por 16 centros (uno de ellos de discapacitados). 

Respecto a los test, Murga ha informado de que se están analizando varias posibilidades con el horizonte de ir realizando más y más análisis y conocer el alcance real de los contagios, algo que parece esencial antes de iniciar la fase de regreso a la normalidad y al contacto social. Ha aludido a una prueba fiable, similar a una de embarazo, y que podría obtener datos en 45 minutos. Se trata de la detección del coronavirus utilizando “sonda de oligonucleótidos en muestras clínicas de pacientes sintomáticos y asintomáticos”. También a otro proyecto de la Universidad del País Vasco (UPV-EHU) y a posibles compras propias al margen de las del Ministerio de Sanidad. La consejera ha remarcado también otras investigaciones más allá del diagnóstico, como el posible tratamiento con plasma de personas recuperadas o un proyecto llamado 'Solidarity' promovido por la OMS.