Urkullu pide “republicanizar” la Corona y que la jefatura del Estado tenga “legitimación social” a través de una consulta ciudadana
El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha planteado en el Parlamento Vasco “republicanizar la monarquía” española “en pro de una mayor transparencia, modernización y legitimación social”. Aunque no ha dado más detalles por falta de tiempo en su intervención durante la sesión de control al Gobierno en la Cámara vasca, la primera de su tercera legislatura, la propuesta de Urkullu tiene una importante carga de profundidad. Según fuentes de la Presidencia vasca, se fundamenta en dos pilares, que la figura de la jefatura del Estado sea refrendada específicamente por la ciudadanía y que “nadie esté por encima de la ley”, tampoco el rey o su predecesor, ahora perseguido por sospechas de corrupción pero blindado por la inviolabilidad penal.
Urkullu ha hecho estas consideraciones en respuesta a la primera pregunta de Vox en su estreno en un pleno de control del Parlamento Vasco. La única representante de la ultraderecha, Amaia Martínez Grisaleña, ha criticado que el Ejecutivo vasco de PNV y PSE-EE cuestione las “más altas instituciones del Estado” y no proteja a la Corona. Vox sostiene que Urkullu colabora con Pedro Sánchez y Pablo Iglesias para “destruir” la nación española y su principal pilar, que aparentemente es la Corona.
El lehendakari ha recordado que en su juramento reciente, que se produjo a principios de septiembre bajo el árbol de Gernika, prometió “lealtad a la Corona” entre otros formalismos. Pero no es la primera vez que se posiciona de manera crítica con la monarquía. En puertas del relevo de Juan Carlos I a Felipe VI, en 2014, ya dejó claro que “hay otros modelos en el mundo actual que obedecen más fielmente a la voluntad de la ciudadanía”. “No creo que la monarquía sea en democracia en Europa occidental el modelo institucional más representativo”, aseguró. Y en 2017, cuando Urkullu medió en Catalunya para evitar la independencia unilateral y el 155, llegó a hablar con La Zarzuela para cuestionar el mensaje que envió Felipe VI después del referéndum del 1 de octubre.
Sin embargo, en estos últimos meses Urkullu ha mantenido una relación de cordialidad con la jefatura del Estado. Tras la investidura, Felipe VI recibió al lehendakari en el palacio de La Zarzuela en un ambiente de “cortesía”, según recogió el propio Gobierno vasco. Antes, en julio, en el marco de unas visitas del jefe del Estado a todos los territorios, cargos del PNV dieron la bienvenida al rey en Bilbao y Vitoria.
6