Las bodegas de Rioja Alavesa agrupadas en ABRA han presentado este jueves un disitintivo que pretende ser un nexo de unión que permita impulsar el sector en un momento en que atraviesa una fuerte crisis “una de las peores de las últimas décadas”, dicen. La nueva etiqueta muestra una 'A' -de Álava, de ardoa (vino en euskera), de aroma, de añada, de acidez, de afrutado-, que comparte espacio con una copa para representar una “marca exclusiva que resalta la singularidad y calidad de los vinos alaveses” y que ayudará a los consumidores a “identificar y valorar nuestros vinos, diferenciándolos en el mercado global”.
El distintivo que ha presentado la presidenta de ABRA, Itxaso Compañón, diferenciará, de momento, los caldos de 70 bodegas alavesas unidas a esta asociación, que agrupa fundamentalmente empresas pequeñas de tipo familiar. Aunque la intención es ampliar el radio de acción y conseguir que se sumen cada vez más bodegas al margen de la denominación de origen, es decir, sean de la DOC Rioja o no. “Se trata de identificar los vinos alaveses e intentar así que el consumidor los elija más fácilmente respecto a otros”, dice. En principio la 'A' será una pegatina identificativa que se colocará en las botellas ya etiquetada, para, de cara a la próxima añada, “estar presente en todas las etiquetas de los vinos producidos por los bodegueros de ABRA” y con la esperanza de que se sumen más bodegas. “Hacemos un llamamiento a la unión del sector, invitando a nuevos socios y bodegas a sumarse a este proyecto común”, señala. “Lo que buscamos es un frente unido que permita mantener la autenticidad de los vinos y su legado, indispensable para nuestra supervivencia y la de nuestra comunidad”.
Aunque quiere dejar claro este distintivo va mucho más allá de una promoción, se hará campaña en Donostia, Bilbao y Vitoria para “acercar nuestro producto a los consumidores”. “Educar a los consumidores sobre las cualidades que diferencian a los vinos alaveses, mientras se refuerza el legado y la identidad del sector vitivinícola de Álava”. Además, buscan coseguir una “mayor colaboración entre los pequeños productores y las instituciones para asegurar la supervivencia y proyección del vino local en el mercado global., asegurando una mejor diferenciación en el mercado global”.
Aunque diferenciará a los vinos alaveses, Compañón insiste en que no se quiere representar sólo un origen geográfico. “También quiere representar valores intrínsecos al producto, como la tradición, el esfuerzo y la calidad del vino alavés”, además del compromiso de los viticultores alaveses “con su tierra, su tradición y la excelencia en la producción”.
La nueva etiqueta no anula la polémica por la intención de un grupo de la bodegas alavesas -agrupadas en ABRA, por cierto- de desligarse de la DOC Rioja con una nueva marca, Arabako Mahastiak- Viñedos de Álava. Una denominación que recibió el aval del Gobierno vasco, pero que se encuentra paralizado en los tribunales, y que en cualquier caso, precisa del aval de la Unión Europea. Desde ABRA insisten en que la nueva etiqueta no anula la intención de buscar una DOC propia, pero sí es cierto que la aparca, en un momento en el que el sector necesita unidad para enfrentarse a los problemas de caida de las ventas y excedente de producción.
Precisamente el diputado general de Álava, Ramiro González, se ha referido a la problematica de este sector durante su intervención en el pleno de política general en las Juntas Generales de Álava.
González ha afirmado que van a redoblar los esfuerzos para lograr una “salida colectiva y compartida” ante la crisis de ventas y rentabilidad que afecta al sector del vino de Rioja Alavesa y ha señalado que el Consejo Regulador de la Denominación Rioja tiene un compromiso que “no puede eludir”, porque son necesarias medidas “valientes”. Además ha señalado que profundizarán en la “diferenciación, origen y calidad”, porque no es suficiente “repartir subvenciones económicas temporales y de urgencia”.
“Ahora más que nunca, es imprescindible profundizar en medidas que este Ejecutivo ha mantenido en los últimos años: diferenciación, origen y calidad. No hay otro camino en un mundo global para superar la homogeneización que se está imponiendo en los mercados, y que coloca en situación de desventaja competitiva a pequeños productores y bodegas”, ha añadido
Ramiro González ha defendido acordar “medidas valientes” que reorienten el modelo adoptado en los últimos años, y que “amenaza con la desaparición de explotaciones agrarias y pequeñas bodegas”, según informa Europa Press. “Ese es mi compromiso: liderar desde la Diputación Foral de Alava un nuevo proceso estratégico compartido que actualice el desarrollado en el año 2019 en torno a la economía del vino en Rioja Alavesa”, ha subrayado.
También la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno vasco, Amaia Barredo, señaló el pasado miércoles el sector del vino como uno de los que tendrán el foco de su departamento durante esta elegislatura. Durante su comparecencia en el Parlamento Vasco, Barredo anunció que se destinarán 22,5 millones de euros para la promoción exterior y las mejoras de comercialización y la diferenciación de los vinos de Rioja Alavesa. La consejera pidió al secto que en estos momentos esté “más unido que nunca” porque tiene que establecer unas medidas que “no van a ser fáciles de aplicar” y consideró necesario que se “trabaje más la calidad que la cantidad”.