La Audiencia de Cáceres ha condenado al dueño de la atracción denominada “Prisión de Alcatraz” y de forma solidaria a su aseguradora a pagar 11.200 euros a una mujer que sufrió un accidente en ella y se rompió la clavícula en la feria de la capital cacereña de 2012.
La sentencia pone de manifiesto que el empresario no adoptó las medidas de precaución exigibles para evitar daños por caída.
Los hechos tuvieron lugar el 2 de junio de 2012, sobre las 00:30 horas, cuando la demandante se encontraba en compañía de su novio montando en la atracción, que consiste en una plataforma de cinco jaulas con barrotes de hierro en donde los usuarios “sin ninguna sujeción” dan giros.
La Sala señala que el empresario “no informó de la puesta en funcionamiento de la atracción y la mujer cayó al suelo” “sin que conste que la usuaria hiciese un uso incorrecto de la atracción”.
La mujer tardó en curar 183 días, para ello fue necesario rehabilitación e inmovilización, y le quedaron como secuelas hombro izquierdo doloroso.
El empresario, según la sentencia, facilitó de forma inmediata a la demandante la póliza del seguro.
La demanda fue desestimada por el Juzgado de Primer número 3 de Cáceres y ahora ha sido estimada por la Audiencia Provincial.