Un incendio en la montaña de Lugo arrasa 120 hectáreas y obliga a decretar la alarma por su proximidad a viviendas

La Xunta ha activado la situación de emergencia por riesgo a núcleos habitados en el incendio declarado el martes en Baleira (Lugo), donde han ardido ya 120 hectáreas en un fuego condicionado por el fuerte viento en la zona, que impide desde este mediodía la actuación de medios aéreos de extinción. El viento y la proximidad de las llamas al núcleo de Fórneas ha obligado a la Consellería do Medio Rural a decretar por prevención minutos antes de las 17,00 horas la conocida como 'situación 2', que se activa cuando las llamas de incendios forestales amenazan puntos habitados.

El incendio permanece activo desde las 17,00 horas del martes tras declararse en la parroquia de Cubilledo. El fuerte viento que afecta la zona, con rachas de viento de hasta 70 kilómetros por hora y con dirección cambiante, ha condicionado el trabajo de los equipos de extinción desde su inicio. De hecho, los medios áreos que participaban del operativo han tenido que retirarse en torno a las 13,00 horas y, cuatro horas después, todavía no han podido regresar a un dispositivo en el que, hasta el momento, han participado tres técnicos, 13 agentes, 27 brigadas, 13 motobombas y una pala.

Cinco incendios más

Además del de Baleira, otros cinco incendios más permanecen activos en la tarde de este miércoles en puntos de tres de las cuatro provincias gallegas.

En Lugo hay dos fuegos forestales activos en Viveiro --parroquia de Vieiro-- y Taboada --Xián-- desde minutos antes de las 14,00 horas. En este último han ardido más de 20 hectáreas, mientras que en el primero no hay datos sobre la magnitud de terreno afectado, según la Consellería do Medio Rural.

En Ferrol, un incendio que continúa activo ha calcinado 5 hectáreas desde su inicio a las 14,30 horas de este martes en la parroquia de Brión. También están activos dos fuegos forestales en la provincia de Ourense, en concreto, en Viana do Bolo --Covelo-- y en Padrenda. Sobre estos, tampoco hay primeras estimaciones de superficie afectada por las llamas.