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Por favor, apaguen sus teléfonos: la historia del móvil a través del cine está a punto de empezar

Raúl Masa

Y qué mejor forma de resumir sus 30 años de historia y analizar su evolución que hacerlo a través del cine, la gran pantalla, el séptimo arte... Un negocio que también ha marcado la vida de millones de personas y que, al igual que el móvil, forma parte del imaginario colectivo. Así que, sin más dilación, ha llegado la hora de dar un paseo por las películas que han visto nacer, crecer y desarrollarse los teléfonos móviles.

Ponga un Motorola en su vida (años 80 y 90)

Hoy día, y a falta de ver lo que es capaz de hacer Google con la empresa, tener un Motorola no es lo más habitual, pero hace 30 años la historia era bien distinta, al menos si atendemos al relato que han ido escribiendo las películas que nos llegan desde Hollywood.

La aparición de un móvil más antigua que hemos podido documentar en el cine pertenece al film ‘Wall Street’ (1987), en el que aparece un Motorola DynaTac 8000X, el primer teléfono comercial de la historia, que confiere al personaje interpretado por Michael Douglas el aura de un importante hombre de negocios. Aunque aquel terminal se conoce ahora - cariñosamente - como el “ladrillo”, en aquella época era el mejor ejemplo de teléfono móvil como símbolo de estatus y poder económico.

El DynaTAC fue desarrollado en 1983 por Motorola y salió a la venta el 6 de marzo del mismo año. Pesaba casi un kilo (800 gramos) y medía 33 x 4,5 x 8,9 centímetros. El terminal costaba 3.995 dólares de aquel entonces y su batería solo duraba una hora en conversación. Un año más tarde, 300.000 personas habían comprado el móvil, que se convirtió en un objeto de culto para los ejecutivos de la época.

Tras este dispositivo pionero, el cine nos lleva hasta los primeros grandes logros de la telefonía móvil. Concretamente viajamos hasta el año 1991, cuando el Motorola MicroTAC 9800X tuvo su papel en la película ‘Hook’, una suerte de segunda parte de Peter Pan protagonizada por Robin Williams. Pese a su temática, en principio infantil, las particularidades de aquella cinta con tintes de acción ya empezaban a demandar la presencia de un terminal móvil. Este teléfono, concebido inicialmente como un analógico en 1989, introducía un innovador diseño en el que la tapa y el micrófono se plegaban sobre el teclado. Fue el primer 'flip phone' de la historia.

La que no tenía nada de infantil es ‘Reservoir Dogs’ (1992), el clásico de Tarantino. Los criminales de este film iban a la última en tecnología, con los modelos más relevantes de la época, los ya citados DynaTAC y MicroTAC.

Cambio de concepto

Los tiempos evolucionaban y la gente comenzaba a sentir la imperiosa necesidad de probar esos aparatos con los que se podía hablar por teléfono fuera de casa. Si salían en las pelis, no podían ser malos. Además, mucho antes de lo que podemos imaginar apareció el concepto de 'smartphone'. Pero solo el concepto, eh, que luego cada cual lo ha ido interpretando a lo largo de los años con unas connotaciones distintas.

Así pues, vayamos por ahí: ¿cuándo nació lo que podríamos considerar como el primer “smartphone” de la historia? Aunque volveremos a este debate posteriormente, para muchos el primer teléfono inteligente es el IBM Simon. Este 'cacharro' es el primer intento real en la industria tecnológica de crear un teléfono “con algo más”, mediante la incorporación de servicios de voz y datos, por lo que el equipo funcionaba al mismo tiempo como un teléfono móvil, una PDA (tenía calendario, libreta de direcciones, reloj mundial, calculadora, bloc de notas, correo electrónico y juegos) e incluso como fax. Y precisamente esa sensación de producto multiuso es lo que justifica que algunos lo consideren el primer anticipo de lo que después conoceríamos como 'smartphone'.

Además, lo que resulta realmente impresionante de este dispositivo es que, teniendo en cuenta que salió al mercado en 1993, ya contaba con una pantalla táctil, sobre la que se utilizaba el teclado numérico, sin botones físicos. Y, por supuesto, tuvo su reflejo en el cine. Este teléfono fue un quebradero de cabeza para Sandra Bullock en la película ‘La Red’, en la que la bella actriz interpretaba el papel de informática en apuros. La cinta es antigua, pero si la vemos a la luz de las recientes revelaciones de Edward Snowden sobre el espionaje puede cobrar una segunda actualidad.

A mediados de los 90, poniendo en jaque la hegemonía de la estadounidense Morotola, un nuevo fabricante emerge con fuerza desde el norte de Europa. Entramos así en los años gloriosos de Nokia, recientemente vendida a Microsoft. Son los tiempos de la película ‘Fuera de onda’ (1995), en la que los móviles juegan un papel muy relevante.

Lo que vemos en la imagen es un Nokia 232, el móvil que atrajo a las 'celebrities' y convirtió los teléfonos de bolsillo en algo 'cool' para los jóvenes adinerados (gran parte de culpa la tuvo la película), marcando el punto de inflexión entre el móvil como un instrumento para hacer negocios y el móvil como un producto de consumo. Era un terminal pequeño, verdaderamente portátil, y agradable desde el punto de vista del diseño, pero además tenía unas especificaciones alucinantes para el estandar de la época.

La lucha sin cuartel entre Nokia y Motorola tuvo, como no podía ser de otra forma, su reflejo en la gran pantalla, donde se turnaban para mostrar sus excelencias tecnológicas. Así, en 1996, George Clooney aparecía en la película ‘Un día inolvidable’ con otro terminal de los norteamericanos, en este caso un MicroTAC Piper.

Y, en ese intercambio de golpes, vuelve a entrar en escena la compañía finlandesa, rozando ya el inicio del nuevo siglo y en una peli de espías. Así, en el 'remake' de ‘El Santo’ (1997), Van Kilmer utiliza un Nokia 9000 Communicator, el primero de una serie de dispositivos que siempre sale a colación cuando se discute acerca del orígen de los 'smartphones'. Se trataba de un terminal avanzado, de grandes dimensiones, con conexión a internet, una memoria interna de 8MB y una batería que aguantaba 35 horas en espera y hasta 3 horas en conversación.

Su sucesor, el Nokia 9110i Communicator, logró ir un paso más allá. Su pantalla aún no era a color, pero contaba con un teclado QWERTY deslizable, escondido bajo la pantalla táctil, que sirvió como modelo para teléfonos más actuales como el Motorola Droid.

Y, por fin, cerrando la década en que los dispositivos móviles se hicieron lentamente con el corazón de los usuarios, otra película de acción y una nueva aparición de Motorola, en este caso con el StarTAC que Nicolas Cage utiliza en el film ‘Asesinato en 8mm’ (1999). Otro pedacito de historia de las telecomunicaciones: ¿sabías que fue el primer teléfono 'clamshell' (con forma de concha) de la historia?

El 'efecto 2000' y el 'boom' de los móviles

A estas alturas de la película nadie puede dudar ya de la capacidad de los móviles para cambiar el mundo. Además, a medida que avanzamos en el respaso, su evolución se hace cada vez más palpable. Se reducen las dimensiones, se amplía la memoria, las utilidades cada vez son mayores. Y a todo esto sin duda hay que sumar la llegada de internet con todo lo que eso supone y la irrupción de cada vez más fabricantes en este jugoso mercado.

El primero del que hay que hacer mención es sin duda RIM, la firma canadiense detrás de BlackBerry, que no está pasando ahora por su mejor momento pero que levantó todo un imperio a principios de siglo. Y es que justo un año antes, en enero de 1999, vio la luz su primer dispositivo comercial, la BlackBerry 850. Realmente no era un teléfono móvil como tal, sino más bien lo que popularmente se conoció como un 'busca', un dispositivo que recibía avisos de llamada para su posterior devolución.

Era frecuente que este y otros 'buscas' aparecieran en películas y series de televisión de la época, porque de hecho se convirtieron en un truco de guión para sacar a un personaje de la escena. ¿Te acuerdas? Miraban el aparato, se excusaban y se iban corriendo en busca de un teléfono para devolver la llamada. Qué tiempos...

Llegamos así a los 2000, cuando al contrario de lo que sucede ahora (paradójicamente) los móviles tendían a ser cada vez más pequeños, tal y como queda reflejado en la comedia ‘Zoolander’, donde el protagonista, interpretado por Ben Stiller, ironiza sobre el uso de un móvil del tamaño de un dedo.

Y nosotros nos preguntamos, ¿cuáles son los modelos más pequeños que ha salido a la venta? Ciñéndonos a marcas conocidas, terminales que realmente hayan tenido algún impacto y no hayan sido meros prototipos, destacan el NEC N930, que apenas se puede coger entre los dedos y tiene todas las funcionalidades de un teléfono móvil convencional, y otro 'micromóvil' de apenas 8 centímetros de largo: el Samsung SGH-E888, que pese a su tamaño llevaba una cámara de fotos integrada.

Y es así como, tras esos primeros años en los que el tamaño era lo más importante, llegamos a otro de los elementos clave: la cámara de fotos. El pionero fue Philippe Kahn, que decidió acoplar una Casio QV-10 a un Motorola Star Tac para compartir con sus amigos y familiares la primera imagen de su hija recién nacida.

Más tarde llegaría el Sharp J-SH04, el primero en comercializarse, que pasó algo desapercibido como casi todos los que se adelantan a su tiempo. Y tres años después saldría al mercado el Sony Ericsson T610, que es el primer móvil con cámara que hemos podido localizar en nuestro recorrido por la historia del cine. Concretamente, aparece en la segunda parte de ‘Los ángeles de Charlie’, en el año 2003.

Llegados a este punto, y ya con todo tipo de móviles sobre el tapete (de tapa, en forma de concha, con teclado físico, táctiles, con cámara, sin cámara...), volvemos a la eterna discusión sobre el primer 'smartphone' de la historia. Si bien es cierto que, para muchos, no se puede hablar de teléfono inteligente como tal hasta el desarrollo del primer iPhone de Apple, hay otros terminales que merecen reconocimiento al menos como predecesores, teniendo en cuenta que incorporaban muchas de las funciones que solemos atribuir a un 'smartphone' un buen puñado de años antes.

Aquí tenemos tres protagonistas, y uno de ellos con presencia en las salas de cine. Empezamos por el Ericsson R380, el primer dispositivo que fue vendido con la palabra 'smartphone' como reclamo de marketing, cuando corría el año 2000. Un año más tarde apareció el Kyocera 6035, muy similar en cuanto a dieño y prestaciones, pero con escaso recorrido comercial.

Junto a ellos, en la gran pantalla, el Palm Treo 650. Lo podemos ver en las películas ‘Serpientes en el avión’ - aunque no lo recomendamos - y en ‘Un buen año’, protagonizada por Russell Crowe. Ambas son de 2006, dos años después de que saliera a la venta este candidato a 'smartphone', uno de los que mejor integra los conceptos de teléfono y PDA.

Silencio en la sala: llega el iPhone

Por fin hemos llegado a 2007, el año en que una 'keynote' de Steve Jobs cambiaría para siempre la historia de las telecomunicaciones. Cuando ya parecía imposible revolucionar el sector, llegó Apple y presentó el iPhone. Y ahora sí que no hay ninguna duda: estamos ante un 'smartphone' en toda regla. ¿El primero? Eso lo dejamos a la intepretación de cada uno, pero desde luego el buque insignia de la manzana mordida marcó un antes y un después en la fabricación de teléfonos.

Y entonces comenzó el idilio del iPhone, en todas sus versiones, con Hollywood y el celuloide. Son incontables las películas en que aparece la joya de la corona de Apple, pero podemos citar algunos ejemplos: 'Resacón en Las Vegas' (2009), 'La cena de los idiotas' (2010), 'Sin compromiso' (2011), la cuarta de 'Misión Imposible' (2011), la cuarta de 'Scream' (2011) o 'Ted' (2012). Por aquí han elaborado una lista más completa.

La herencia del iPhone es innegable, pero todo el mérito del 'boom' de los teléfonos inteligentes que se vive en nuestros días no se le puede atribuir a Apple. Google, que hoy es propietaria de la empresa que dio el primer paso hace 30 años, también merece un lugar destacado en la historia de la telefonía móvil gracias a Android.

En octubre de 2008 salió a la venta el primer terminal con este sistema operativo, el HTC Dream, que vendría seguido por toda una serie de grandes éxitos de los taiwaneses (Hero, Desire...), auténticos dominadores durante los primeros años del ecosistema del robot verde. Uno de sus dispositivos, que llegó cuando ya comenzaba el declive, es el HTC Thunderbolt (2011). ¿Y sabéis en qué película aparecía? En la mismísima Crepúsculo. Una cinta que por lo demás estaba completamente plagada de ordenadores con el logo de la manzana mordida.

Y, claro, ahora que hemos llegado a la actualidad, prácticamente no hay película o serie de televisión en la que no aparezca un 'smartphone' y el 'product placement' se ha convertido en una estrategia de marketing habitual para la gran mayoría de los fabricantes. Tanto es así que hay hasta blogs exclusivamente dedicados a recopilar estos promocionales cameos.

Y así llegamos al final de este recorrido por la historia de la telefonía móvil a través del cine. Ni mucho menos están todos los que son, y tal vez ni siquiera son todos los que están, pero hemos preferido centrarnos solo en los dispositivos que, por una u otra razón, sentaron cátedra. Además, para eso están los comentarios, ¿no? ¿Conoces algún otro terminal histórico retratado por el séptimo arte? Seguro que entre todos ampliamos la lista.

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