El Ayuntamiento de Madrid borra el mural en recuerdo de Lucrecia Pérez, asesinada por neonazis

Menos de cinco meses ha permitido el Ayuntamiento de Madrid, del Partido Popular, que un mural homenajee en el centro del barrio de Aravaca a la migrante dominicana Lucrecia Pérez, asesinada a balazos por neonazis una noche de noviembre de 1992 en las ruinas de la discoteca Four Roses. La pared del edificio que lucía ese mural, situado en la céntrica plaza de la Corona Boreal, ha amanecido este sábado sin la pintada de recuerdo, según denuncian a elDiario.es miembros de la Asociación de Vecinos Osa Mayor.

El motivo de la eliminación del mural coincide con un acto municipal previsto para este mediodía: la concejala de Moncloa-Aravaca, Loreto Sordo, acompañada de la delegada de Seguridad y Emergencias y portavoz municipal, Inmaculada Sanz, y el concejal delegado de Innovación y Emprendimiento, Ángel Niño, inaugura el 'Aravaca Innovation Lab' (en español, Laboratorio de Innovación de Aravaca), especializado en ciberseguridad.

Más Madrid en el distrito de Moncloa-Aravaca también ha denunciado la eliminación del mural, mientras el edificio que hoy tiene previsto inaugurar el Ayuntamiento ha amanecido lleno de pintadas reclamando la vuelta del homenaje. Entre otras: “El mural va a estar siempre”, “Aravaca antirracista”, “Lucrecia, tu barrio no te olvida”.

La elección de la plaza de la Corona Boreal, el sitio donde varias asociaciones de vecinos y partidos de izquierda pedían que volviera a ser colocado el mural, no es anecdótica. Allí se reunía en 1992 la colonia de migrantes dominicanas que trabajan como empleadas del hogar en este acomodado barrio de Madrid, como era el caso de Lucrecia Pérez.

El mural ha sufrido idas y venidas. Elaborado en tiempos de la alcaldesa Manuela Carmena, el alcalde José Luis Martínez-Almeida lo eliminó a finales de 2021. En 2022, coincidiendo con el 30 aniversario del que fue declarado oficialmente como primer asesinato racista en España, el Ayuntamiento inauguró una rotonda y un monumento de recuerdo, pero en una ubicación –contra la voluntad de asociaciones de vecinos– alejada del centro del barrio, en una zona de tráfico rodado y poco frecuentada por los aravaqueños.

En esas mismas fechas de noviembre de 2022, activistas volvieron a reproducir el mural en el corazón del barrio y allí ha permanecido hasta este sábado.

Lucrecia Pérez fue asesinada a los 32 años y cuando solo llevaba unas semanas en España. Entre los asesinos estaba Luis Merino, guardia civil y el único mayor de edad, que fue el autor material de los hechos. Lucrecia se refugiaba aquella noche con otros compatriotas en las ruinas de la discoteca Four Roses de Aravaca. Fue el primer crimen juzgado como delito de odio con motivaciones racistas en la historia de España.