Un agente condenado por torturas en Malasaña, nuevo jefe de Policía en Cantabria

El nombramiento del comisario Héctor Moreno García como nuevo jefe de Policía en Cantabria ha generado una fuerte polémica al conocerse que este agente fue condenado por torturas y detención ilegal durante las fiestas del Dos de Mayo del barrio de Malasaña.

Los hechos tuvieron lugar en el año 1982, cuando Moreno llevaba trabajando seis años en el Cuerpo Nacional de Policía. Era un 29 de abril por la noche cuando cinco policías detuvieron “sin causa alguna” a varios transeúntes. Uno de ellos golpeó con su pistola en la cabeza a uno de los arrestados y después se ayudó del propio Héctor Moreno García para restregar su cabeza por unos cubos de basura cercanos. Otro de los detenidos fue golpeado repetidas veces contra la puerta de un coche policial, reza la sentencia, dictada en el año 1994, que recogió El País.

La agresión no quedó impune gracias a que entre los agredidos estaba el abogado Luis María Figueroa, quien presenció el inicio de las agresiones a la salida de un bar e intentó pararlas. Los agentes, en lugar de frenarse, la emprendieron a golpes con el abogado, quien fue golpeado fuertemente y estuvo tres meses de baja tras una operación por la aparición de una hernia, a causa de los impactos. “Les dije que me soltaran y uno de elles me pegó un rodillazo en los testículos”, relató en su momento a El País.

Héctor Moreno García fue condenado por los hechos a seis años de inhabilitación, pena que nunca cumplió porque fue indultado en 1998, con Aznar en la presidencia del Gobierno. Entonces se le concedió el perdón a condición de que no volviera a cometer otro “acto doloso” en el tiempo que duraba la condena. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ya ha expresado su “profunda preocupación” por este nombramiento llevado a cabo por el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido,