El plan secreto para que Italia abandone el euro

“Todavía se puede evitar el desastre”

La prensa europea y también los grandes diarios norteamericanos siguen al detalle las últimas evoluciones de la crisis política italiana. Este jueves se destaca que la Liga Norte y el M5S están intentando recomponer su coalición y volver a intentar que su gobierno sea aceptado por el presidente de la República. Con el mismo candidato a primer ministro, el abogado Giuseppe Conti, y también con Paolo Savona, que fue rechazado por el presidente como titular de economía, pero que ahora ocuparía la cartera de exteriores. Los diarios económicos también destacan que en las dos últimas jornadas ha bajado un tanto la presión de los mercados, que la bolsa ha subido y la prima de riesgo ha descendido.

“Italia tiene todavía tiempo para evitar el desastre”, dice el Wall Street Journal en un artículo en el que pide moderación a la Liga y al M5S en sus decisiones en el caso de que llegaran al gobierno. Y Luigi di Maio, líder operativo del M5S, ha vuelto a insistir en que en los últimos tiempos su partido no hablado para nada de que Italia abandone el euro, una posibilidad que es la gran fuente de inquietud en los mercados y en el mundo político europeos.

El plan de Paolo Savona

Como contrapunto de lo anterior Il Corriere della Sera publicaba el jueves la estrategia que el nuevo gobierno seguiría para abandonar el euro. El plan ha sido redactado por el citado Paolo Savona, un economista de 81 años. Pero Il Corriere no dice cuándo y puede que fuera hace un tiempo. Éstos son algunos de sus pasajes:

“Todos los preparativos para la salida se harán con gran discreción, en reuniones clandestinas de pocos funcionarios. Sólo cuando la cosa esté hecha se advertirá a los socios europeos, a los órganos oficiales y al FMI. El grado de éxito del plan está en función del nivel de secretismo que se consiga. También para prevenir la fuga de capitales: se trataría de crear un comité formado por instituciones públicas y privadas, que debería actuar en la sombra durante meses, para luego salir de improviso a la luz y colocar al mundo y a la UE frente al hecho consumado”.

“Sería adecuado buscar la cooperación de la Comisión Europea y del BCE. Para ello bastará aceptar las deudas contraídas y hacer declaraciones amistosas sobre los demás miembros. El paso siguiente será la impresión y la distribución de la “nueva lira”. Para evitar que los cuentacorrentistas retiren su dinero en metálico se aconseja cerrar los bancos y los mercados y aumentar drásticamente los controles sobre las transacciones y sobre todas las instituciones monetarias”.

“Para completar la operación haría falta un máximo de 7 meses. Para la planificación en secreto de la salida se necesitaría un mes. La notificación a los socios dela eurozona y a las organizaciones monetarias se llevará a cabo un viernes, para evitar el impacto sobre las bolsas y que la gente corra a las ventanillas bancarias. En los tres días del fin de semana las autoridades desarrollan el plan y el gobierno cambia la denominación de la deuda. El lunes se introduce la nueva lira en paridad con el euro y se reconvierten los salarios. Entre el martes y el miércoles se reabren los bancos y los mercados financieros. Y en un plazo de 3 a 6 meses se completará la conversión y habrá liras suficientes para sustituir definitivamente al euro”.

Parece un cuento de hadas. Y puede que en el fondo lo sea.

Viene un gran recorte del dinero europeo para la agricultura

Le Monde adelanta este jueves las dimensiones que tendrá el recorte de la Política Agraria Común anunciado el 2 de mayo por la Comisión Europea como consecuencia del “agujero que el Brexit producirá en el presupuesto comunitario (10.000 millones de euros anuales) y de la necesidad de financiar las nuevas prioridades de la UE (defensa, informatización y migración)”.

Las cifras que proporciona el diario parisino se refieren específicamente a Francia, primer país perceptor de las ayudas de la PAC, pero Le Monde añade que “el mismo régimen se aplicará a los agricultores alemanes, italianos o griegos”, sin hacer referencia de España. Que probablemente será tratada de forma similar, aunque habrá que esperar a que se confirme.

“Según el comisario de agricultura, Phil Hogan, la PAC disminuirá un 5 % en el periodo post-Brexit (2021-2027). Pero si ese porcentaje se mide en euros corrientes, el recorte será del 12 %. El otro pilar de la PAC, la cofinanciación europea de proyectos rurales (ayuda a la instalación, a la agricultura biológica) la caída será del 23 % en euros constantes en el periodo 2012-2027”.