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La dirección del PP desautoriza a Cifuentes y toma las riendas para recomponer la situación con Ciudadanos

El coordinador general del PP, Fernando Martínez Maillo

Gonzalo Cortizo

La dirección del Partido Popular ha decidido entrar en escena y tomar las riendas de la gestión política del escándalo Cifuentes. El PP se pondrá en comunicación con la dirección de Ciudadanos a lo largo de las próximas horas para intentar recomponer la posibilidad de impulsar la Comisión de Investigación en los términos que exija Albert Rivera.

El coordinador general del PP, Fernando Martínez Maíllo, ha asegurado que no dejarán caer a Cifuentes “todavía”. La estrategia de Génova es sustituir al equipo de la presidenta madrileña en las negociaciones con Ciudadanos e intentar que la comisión de investigación se produzca a cualquier precio. La dirección del PP quiere evitar tener que pasar al escenario de entregar la cabeza de la presidenta madrileña o asumir una moción de censura. “después se podrá contestar a otras preguntas sobre el futuro, ahora no está en debate esa cuestión”, ha asegurado Maíllo.

El número tres del PP se ha mostrado convencido de que todavía están a tiempo de darle la vuelta a la petición de dimisión realizada por la formación que lidera Albert Rivera. Para ello, están dispuestos a borrar de la lista de comparecientes los nombres propuestos por el PP de Madrid, incluido el del periodista del diario El Mundo, en cuyas informaciones se ha apoyado Cifuentes para abonar la teoría de una conspiración elaborada por el Partido Socialista.

Génova tampoco comparte la decisión de Cifuentes de querellarse por la vía penal contra el director de eldiario.es, Ignacio Escolar y la periodista Raquel Ejerique: “El PP no quiere meter a nadie en la cárcel”, ha asegurado Maíllo, en referencia a las intenciones de la presidenta madrileña contra los principales responsables de las informaciones de eldiario.es que han destapado el escándalo.

El coordinador general de la formación conservadora cree que la petición de dimisión lanzada desde Ciudadanos es “precipitada”. Considera que las relaciones entre PP y Ciudadanos están rotas a nivel de las estructuras en Madrid y por ello han decidido que sea la dirección del partido la que hable con la dirección nacional e Ciudadanos. Preguntado sobre la posibilidad de ofrecer cesar a la presidenta madrileña, Maíllo asegura que “no estamos en ese escenario todavía”. Según Maíllo, “Ciudadanos debe valorar si quiere optar por la estabilidad o por ir a una moción de censura con Podemos”.

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