El arzobispo de Madrid ofrece “total colaboración” a Manuela Carmena para alcanzar acuerdos “en beneficio de los madrileños”
El arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, se ha reunido este lunes al mediodía con la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena en la sede del Arzobispado en la calle Bailén, en el marco de las visitas institucionales que esta está realizando tras su reciente toma de posesión. Se trata del primer encuentro oficial entre un alto mandatario de la Iglesia española -Osoro es vicepresidente de la Conferencia Episcopal- y un líder de los “partidos emergentes”, desde las elecciones autonómicas y municipales del pasado 24 de mayo
La reunión, de menos de una hora de duración, se ha sucedido en un clima de “gran cordialidad”, según el propio Arzobispado, quien ha destacado el espíritu constructivo del encuentro, en el que ambas partes han dejado la puerta abierta a la solución de cualquier problema existente entre ambas instituciones. Entre ellos, la construcción del llamado mini-vaticano -el complejo de la Iglesia en las Vistillas de Madrid, y que desde la llegada de Osoro está paralizado- y la imputación de la portavoz de Ahora Madrid, Rita Maestre, por entrar en la capilla de la complutense con el torso desnudo.
Sobre este último punto, que se ha tocado tangencialmente -se trataba de una primera toma de contacto- el líder de la iglesia en Madrid ha quitado hierro al asunto, como ya hizo hace unas semanas. Rita Maestre participó en 2011 en una protesta en la Universidad Complutense de Madrid por el cierre de la capilla de la Iglesia en el campus, de titularidad pública. Junto a decenas de personas, entró con el torso desnudo en la capilla. La Fiscalía de Madrid le pide un año de prisión por un delito contra la libertad de conciencia, los sentimientos religiosos y el respeto a los difuntos».
Sin embargo, Osoro ha manifestado a Carmena su voluntad de dejar pasar ese asunto y se ha mostrado “abierto a futuras colaboraciones en beneficio de todos los madrileños”, según ha señalado el propio Arzobispado. Fuentes de la institución han destacado el clima relajado y la sintonía en este primer encuentro, que tendrá continuidad en los próximos meses, así como distintos encuentros de las comisiones mixtas Arzobispado-Ayuntamiento para colaborar en muy distintos ámbitos, desde la educación a las celebraciones religiosas, pasando por la permuta de terrenos o la edificabilidad de parroquias en nuevos barrios en construcción
En este punto, Osoro ha invitado a Manuela Carmena a acudir a las celebraciones litúrgicas de la Virgen de la Paloma, a mediados de este mes de agosto. Ambos han bromeado sobre el uso del transporte público por parte de la alcaldesa y el deseo del arzobispo de poder hacer lo propio.
En repetidas ocasiones, el arzobispo de Madrid ha mostrado su intención de ser “el obispo de todos, estar con todos, no sólo con los creyentes. Hablaré con todos los que me encuentre, saldré por las calles. Así soy, no sé hacer otra cosa”, y ha fomentado encuentros con diversos líderes políticos. Así, se vio con Antonio Carmona antes y después de las elecciones -el político socialista, incluso, contribuyó a explicar el contexto en que se produjo el polémico homenaje a Pedro Zerolo en la parroquia de San Antón-; y tiene previsto encontrarse tanto con Cristina Cifuentes como con los líderes madrileños tanto de Podemos -José Manuel López, quien trabajó muchos años en Cáritas- como de Ciudadanos, Ignacio Aguado. Ya se ha encontrado en alguna ocasión, si bien privadamente, con el líder del PSOE en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo.
“Siempre he procurado entablar diálogo con todas las fuerzas políticas. Ahora, en Madrid, seguramente deba hacerlo con más asiduidad. Pero una cosa es tener contactos, llegar a acuerdos, llevarme bien con todas las fuerzas políticas, estar disponible para todos, y otra muy distinta que se pueda decir de mí que voto a uno u otro partido. Un obispo tiene que serlo de todos, creyentes y no creyentes, de izquierdas, de derechas y de centro” aseguró el arzobispo nada más tomar posesión. El nuevo panorama político de Madrid y, por extensión, de este país, hará que muy pronto comprobemos la veracidad de este compromiso.