Los países que más contaminan aprovechan la Cumbre del Clima para promocionar el carbón y el petróleo
Lo que todos temían hace dos años toma forma ahora en la Cumbre del Clima de Katowice (Polonia). EEUU, el segundo emisor de CO del mundo, no solo se desliga del Acuerdo de París sino que, en la práctica, lo torpedea: quiere extraer los recursos fósiles que todavía quedan en su territorio. “EEUU tiene abundancia de recursos naturales y no los va a dejar bajo tierra”, ha sido el mensaje del asesor en clima y energía del presidente Donald Trump, Wells Griffith, en la COP24.
Además, a EEUU le han surgido aliados en su promoción del uso del petróleo, el carbón o el gas. Rusia, Arabia Saudí, Kuwait o Australia se han alineado en mayor o menor medida. Así que, en medio de las negociaciones climáticas, los combustibles fósiles han recibido un impulso cuando París había hilvanado un consenso internacional sobre la necesidad de ir abandonándolos.
La frase del asesor norteamericano menoscaba el acuerdo científico de años que ha calculado que el 80% de los combustibles fósiles deben quedarse sin explotar para limitar realmente la temperatura del planeta. Entre ellos, el 90% del carbón ruso, norteamericano y australiano. Y, al menos, dos tercios del chino. La campaña internacional para conseguir este objetivo rezaba: Keep it in the ground (déjalo enterrado). Precisamente las palabras de Griffith brotaron en un foro sobre el llamado por sus partidarios “carbón limpio” celebrado al calor de la COP24.
Esta especie de alianza del fósil contó con el encargado de clima y energía del Gobierno de Australia sentado con el asesor norteamericano. Además, solo unos días antes y también en Polonia, las delegaciones de EEUU, Rusia, Arabia Saudita y Kuwait impidieron que la cumbre asumiera el último informe del IPCC sobre la necesidad de “medidas inusuales” para contener el calentamiento global en 1,5 grados. Lo dejaron en “tomamos nota” del estudio.
'Fake news' climáticas masivas
El eurodiputado de Equo Florent Marcellesi explica que EEUU “hasta ahora, desde que Trump anunció que abandonaban el Acuerdo de París, se había mantenido observando, pero ahora es que bloquea los avances”. Marcellesi analiza que este conjunto de países “está utilizando las noticias falsas climáticas masivas como arma política”. Y abunda en que Griffith aseguró “sin pestañear, que estaban reduciendo las emisiones de CO y mejorando la economía” con sus políticas.
El grupo en torno a los norteamericanos ocupa los últimos puestos mundiales del ranking de Actuación Climática realizado para German Watch y Climate Action Network presentado también en la COP24 de Polonia. Rusia aparece como “el peor estado del mundo en cuanto a energías renovables”. Sobre Australia, el ranking dice (antes de comenzar las conversaciones) que su Gobierno “se ha convertido en una fuerza regresiva en las negociaciones internacionales, menospreciando el informe del IPPC sobre el 1,5ºC”. No tienen, explican, “un plan para desprenderse del carbón”. En el análisis de Arabia Saudí, entre otros aspectos, se critica “la muy pobre actuación en las negociaciones internacionales”.
En esta situación, los ojos viran inmediatamente hacia la Unión Europea. Sin embargo, la Comisión ya ha deslizado que no es un momento adecuado para poner más ambición encima de la mesa, según ha comentado el comisario de Acción Climática Miguel Arias Cañete en un encuentro informal este martes en Katowice.
El eurodiputado holandés Bas Eickhout, de la delegación del Parlamento Europeo en Polonia, explica que “muchos países de la Unión Europea están ocupados por su política interna: el Brexit, la sucesión en Alemania, los chalecos amarillos de Francia. No están concentrados en la cuestión del cambio climático y eso debilita la posición europea”. El diputado de los Verdes entiende que esto “deja el espacio libre para los que no quieren acordar una mayor ambición climática. Incluido el país anfitrión: Polonia que trata de vender el carbón limpio”.
El encargado de cambio climático de la SEO-Birdlife, David Howell, resume la situación que se ha amasado en la ciudad minera polaca: “El informe científico sobre el 1,5ºC es casi como un desafío para las grandes economías y empresas asociadas a los combustibles fósiles. Y también de geoestrategia”.
Para Howell, veterano de las cumbres climáticas, “siempre hay riesgo de que estos países menoscaben las conversaciones, pero con el planeta dándole la razón a los científicos y a los movimientos ambientalistas, buscan ganar tiempo para poder ganar posición económica y geoestratégica en un mundo que quiere y necesita deshacerse de los combustibles fósiles”.