Localizan los cadáveres de los dos trabajadores atrapados en el derrumbe del techo de un colegio en Gijón

Los bomberos han hallado los cadáveres de los dos trabajadores que habían quedado atrapados bajo los escombros tras el derrumbe registrado en el Colegio San Vicente Paúl, de Gijón, según ha informado el Ayuntamiento. Los fallecidos tenían 38 y 40 años, eran primos y vivían en Mieres.

Los primos se encontraban trabajando en el inmueble cuando, pasadas las 11.30 horas se produzco el derrumbe, cuyas causas aún se desconocen. Junto a ellos había otros dos operarios, que han resultado heridos; uno de ellos fue atendido en el lugar de los hechos y dado de alta posteriormente, y el otro, trasladado al hospital. Los cuatro estaban realizando labores de mantenimiento en el techo de una de las plantas del edificio cuando se vino abajo una parte del forjado de la terraza ubicada en la azotea del mismo.

Al lugar de los hechos se trasladaron Policía y bomberos, según cuentan medios locales. El primero de los dos cadáveres fue rescatado aproximadamente sobre las 15.00 horas y el segundo, una después, en torno a las 16.25 horas. La zona se ha acordonado, además, para garantizar la seguridad de quienes pasen por el lugar.

“No hay palabras. Terrible”, ha manifestado el presidente de Asturias, Adrián Barbón, en un mensaje en redes sociales, en el que ha dado el pésame a las familias. Barbón se ha trasladado al lugar de los hechos, junto a la consejera de Educación y la alcaldesa de Gijón, entre otras autoridades.

Cuando se ha producido el derrumbe, los trabajadores estaban haciendo “una obra menor” en el techo del edificio, según responsables del centro educativo que cita El Comercio. El director del centro ha asegurado a ese medio que según les habían trasladado, no era “nada complejo”, ni tampoco tenía que ver “con la magnitud de lo que ha ocurrido”.

En el colegio San Vicente Paúl de Gijón, ubicado en un edificio de tres plantas y sótano, cursan sus estudios 690 alumnos que hoy disfrutaban de sus vacaciones de Navidad y había sido sede de la Escuela de Comercio hasta que en junio de 1916 fue adquirido por las Hijas de la Caridad para convertirlo en centro educativo y se realizaron diversas ampliaciones hasta 1932.

El centro concertado cuenta actualmente con seis unidades de Educación Infantil de 2º ciclo (de 3 a 6 años); doce de Educación Primaria (de 6 a 12 años) y diez de Educación Secundaria Obligatoria (de 12 a 16 años).