'Sálvame' afronta su enésimo aviso de abandono, ahora de Canales Rivera: “Que nos quedamos solas”
El momento de crisis en que está sumido Sálvame durante los últimos tiempo se ha de sumar una nueva dinámica dentro del programa: los continuados conatos de abandono por parte de su colaboradores. Durante la pasada semana, se producían dos amagos de marcha del programa, el de Anabel Pantoja (que ha protagonizado varios desde que se reenganchó al magacín) y el de María Patiño. En ambos casos, el programa tenía que paralizarse. Apenas estamos a martes de la presente semana, y ya se ha vivido otra situación similar.
Ha sido José Antonio Canales Rivera quien, sin aspavientos pero en un tono firme, ha amenazado con abandonar la disciplina del formato vespertino de La Fábrica de la Tele. El motivo no era otro que las nuevas informaciones que el programa anunciaba tener sobre un presunto affaire que habría tenido el torero a comienzos del verano pasado.
“Si seguís por ahí, yo abandono”
El diestro era convocado para participar ya en el Lemon Tea, la primera hora de Sálvame, para hacer frente al contenido de unos mensajes de móvil que datarían de junio de 2021, cuando aún estaba con su ya expareja. Sálvame pretendía que Canales Rivera escuchase estas conversaciones, pero él se mostraba como mínimo disconforme: “La verdad es que me interesan más bien poco”.
A continuación, manifestaba su malestar con el programa: “Voy a decir una cosa antes de que sigáis: yo, por estas gilipolleces, perdí a la persona que más amaba y quería, y perdí mi lugar de confort, mi hogar y me casa. A estas alturas, ahora que estoy intentando poner en orden todas mis cosas, sobre todo mi cabeza, después de lo que he pasado en estos últimos 5 meses, ponerme esto para hacerme daño gratuito, no solo a mí, también a aquella persona a la que he querido tanto...”, se quejaba y avisaba: “Si seguís por ahí, yo abandono”.
“No tengo ninguna necesidad de aguantar esto”, reiteraba el exconcursante de Secret Story. “¿Tú qué crees que debería hacer el programa?”, le inquiría ella, con tono crítico. “No le voy a decir al programa lo que tiene que hacer, porque lleva funcionando con una audiencia increíbles desde hace 12 o 13 años. Yo sé lo que voy a hacer. Me voy a ir”.
“¿Pero estás hablando en serio?”, reaccionaba María Patiño, que reprochaba esta actitud de su compañero. Esto hacía que Canales Rivera enumerara las ocasiones en las que “se ha prestado” a situaciones del programa en las que quedaba en mal lugar. “He seguido participando y me he tomado todo con una sonrisa. Me encanta venir y estar con vosotros, pero no que me vuelvan a hacer eso y retomar cosas de hace meses. Porque como esa historia podemos estar la vida entera”.
“Madre mía... ¡Que nos quedamos solas, Terelu!”
Mientras que Terelu Campos comprendía la actitud de Canales Rivera, aunque le recomendaba “relativizar”, Patiño se encendía y reprochaba a este sus razones, esgrimiendo su participación en reality shows y asegurando que por estar en televisión ganaba más dinero que con sus corridas de toros. Ese comentario ha enfadado particularmente a Rivera: “No es justo que me trates así”.
El aludido ha acabado recalcando su postura: “Si lo queréis poner [lo referente a sus mensajes con otra mujer], lo ponéis, pero yo no voy a participar más”. “Los límites los pones tú”, concedió Patiño, que trató de limar asperezas acercándose a Canales, mientras Terelu trataba de encontrar algo de orden dentro de la escaleta, ahora que Sálvame Lemon Tea parecía acceder a no tratar el tema con el matador.
“No te enfades conmigo”, le pedía cogiéndole de la mano. “Mira, ahora vamos a hablar de otro compañero que también va a abandonar”, le decía, refiriéndose a Kiko Matamoros, del que introducían informaciones sobre sus problemas familiares. “Madre mía... ¡Que nos quedamos solas, Terelu!”.
