La autopsia revela que Laura Luelmo fue agredida sexualmente
La joven profesora Laura Luelmo fue agredida sexualmente, según ha revelado la autopsia, que sitúa la muerte, por la que fue detenido Bernardo Montoya, dos o tres días después de la desaparición. Fuentes cercanas a la investigación han informado a Efe de que ésta es una de las conclusiones de los forenses que han practicado la autopsia, de la que también se deduce que la víctima murió a causa de “un fuerte golpe en la frente con objeto contundente, un palo o una piedra”, entre el 14 y el 15 de diciembre.
Laura Luelmo, de 26 años, desapareció el pasado día 12 de diciembre en El Campillo, una localidad de Huelva a la que acababa de trasladarse para cubrir un puesto de maestra en el municipio vecino de Nerva. La joven murió dos o tres días después de un fuerte golpe, según el análisis de los forenses. El primer análisis forense clínico desmiente la versión que había dado Montoya por la mañana, durante la reconstrucción del crimen en el lugar de los hechos y ante la Guardia Civil. El detenido había asegurado que intentó agredir sexualmente a la joven, pero no llegó a consumar la violación.
Confesión del detenido
El hombre detenido este martes por su supuesta implicación en la muerte de la joven profesora, natural de Zamora, ha confesado que fue él quien la mató. Bernardo Montoya salió de prisión el pasado octubre tras cumplir veinte años encarcelado por el asesinato de una anciana en 1995 en su localidad natal en Cortegana (Huelva) y dos robos con fuerza. El detenido fue trasladado en la madrugada del martes a dependencias de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, donde fue interrogado por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO), y salió del cuartel sobre las 12.15 horas a pie, escoltado por dos agentes, esposado e increpado por los vecinos.
La investigación trata de clarificar si la muerte de Laura Luelmo sucedió tras ser raptada contra su voluntad, para lo que el detenido habría utilizado su coche negro marca Alfa Romeo, como creen los investigadores. No se descarta que la joven muriera malherida en el paraje donde se halló el cuerpo el pasado lunes, extremo este último que defiende Montoya, que en su relato ante los agentes aseguró que había entablado una conversación con la maestra, aunque no llegó a consumar la violación.
La familia está a la espera de poder trasladar el cuerpo de la joven hasta su localidad natal en Zamora y darle sepultura.