El Instituto Cervantes quiere defender con diplomacia cultural a los hispanohablantes que son discriminados en EE.UU

El Instituto Cervantes quiere defender con diplomacia cultura a los hispanohablantes que sufren discriminación en Estados Unidos. Así lo ha avanzado su director, Luis García Montero, que ha recordado que se prevé la puesta en marcha de un nuevo centro en Washington con el objetivo de que “se de respuesta desde la diplomacia cultural” a las discriminaciones que están sufriendo en los últimos meses muchos hispanohablantes.

“Cualquier persona debe ser defendida en dignidad cuando habla su lengua materna”, ha expresado en un encuentro con los medios, este lunes 8 de octubre en Madrid, para adelantar las acciones que el Instituto tiene pensado llevar a cabo y que se abordarán en el Patronato esta misma tarde, donde, según ha adelantado, acudirán algunos de los nuevos miembros. Entre los nuevos patronos se encuentran Joan Manuel Serrat, Ricardo Darín, José Carlos Plaza, Estrella de Diego, Piedad Bonnett y Cesar Alierta.

Junto con el centro de Washington, García Montero ha recordado que también prevén reabrir el de Gibraltar. Según ha explicado, la sede se cerró en 2015 “por una decisión política”. Con su reapertura, el Instituto Cervantes aspira a “crear puentes” con Gibraltar, un lugar con el que “se han generado distancias” tras su salida de la Unión Europea debido al Brexit.

Además, el Instituto Cervantes prevé un nuevo centro en Los Ángeles. Para poner en marcha estas y otras medidas, García Montero ha señalado que han propuesto un incremento del 5% en los presupuestos para 2019 de la institución, hasta los 131 millones de euros. En dicha propuesta sigue vigente que el Instituto se autofinancie en un 46%.

Otro de los proyectos en los que se está trabajando es en la inauguración de un Museo de la Lengua en Madrid con el objetivo de “contagiar el español” a la ciudadanía. Dicho Museo se encontrará en los espacios expositivos del edificio central del Instituto. Para ello, García montero ha asegurado que trabajarán junto a la RAE en una “relación muy estrecha”.

Por último, el Cervantes llevará también a cabo la creación de un organismo que integre y coordine todos los Institutos de español de Iberoamérica así como un Círculo Iberoamericano de Amigos del Instituto Cervantes que reúna a “personas, voluntades y entidades” con el objetivo de llevar a cabo actividades culturales.

En cuanto a cifras, ha destacado que, desde su entrada en funcionamiento, más de 162.000 aspirantes se han presentado a la prueba de Conocimientos Constitucionales y sociocultares de España (CCSE) que se debe superar para obtener la nacionalidad española por residencia o por su origen Sefardí.

Se trata de una cifra que este año ha experimentado un aumento respecto al año anterior. “Es un examen bien articulado que sirve como mecanismo para la integración y no para la separación”, ha asegurado.

Para él, el Cervantes es “una Institución de Estado y no de Gobierno”, y, por ello, considera que “sus análisis no nacen de un pacto con un gobierno concreto”. “Todos los miembros en el organigrama intentan consolidar una profesionalización del Instituto por encima de los gobiernos concretos”, ha dicho.

Precisamente, el director del Instituto Cervantes se ha referido a la decisión del director de la RAE, Darío Villanueva, de no presentarse a la reelección y se ha “solidarizado” con los problemas económicos que está viviendo la RAE, lamentando “lo poco que ha importado la cultura en los presupuestos”.

“Comprendo su malestar ante la situación económica que vive la Academia”, ha asegurado, para mostrar su “amistad y admiración” por Villanueva, de quien ha destacado que “desde hace mucho tiempo coinciden en los estudios literarios”. “Siento admiración intelectual por él”, ha resaltado.