Vox contraprograma el 8M en Andalucía con una manifestación contra el “feminismo maquinador y supremacista”
Vox ha registrado este miércoles su primera proposición no de ley en el Parlamento andaluz, relativa a la lucha contra el “feminismo superrealista”. La formación ultraderechista ha contraprogramado las manifestaciones convocadas para el próximo 8 de marzo -Día internacional de la Mujer trabajadora- con una manifestación en Madrid, dos días después, bajo el lema “En Femenino Sí y en Masculino también”. “El feminismo maquinador de las huelgas del 8M está en horas bajas. En realidad jamás gozó de status mejor, en lo que a credibilidad y grado de convencimiento de los españoles se refiere”, arranca la exposición de motivos de esta iniciativa, que previsiblemente se debatirá y votará en el próximo Pleno del Parlamento, en la previa del 8 de marzo.
La proposición no de ley de Vox insta a la Cámara legislativa y al Gobierno andaluz de PP y Ciudadanos a apoyar la “Plataforma Women of the World en Andalucía” el próximo 10 de marzo en Madrid, en defensa de la “igualdad real entre hombres y mujeres”. Este movimiento, según la iniciativa registrada, representa a “un nutrido grupo de mujeres no feministas de género”, y la manifestación del 10 de marzo está organizada por la asociación Profesionales por la Ética, “con el objetivo de hacer frente a ese feminismo rancio y pasado de moda y a la ideología de género en la que desemboca”.
Profesionales por la Ética es una asociación ultraconservadora que abanderó, junto al PP, las protestas en la calle y el litigio judicial contra la asignatura de Educación para la Ciudadanía y contra la ley de matrimonios homosexuales, aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. En el escrito presentado en el Parlamento andaluz, Vox asegura que esta asociación “se ha reunido con Cs, PP y Vox en Madrid, con encuentros muy fructíferos y complacientes, obteniendo amplio apoyo de estos partidos a sus planteamientos”. La iniciativa denuncia duramente “un concepto de mujer” impulsado por “lobbies feministas radicales, algunos medios de comunicación y partidos políticos”, en el que “se arrincona la maternidad”.
La formación de Santiago Abascal tiene 12 diputados en el Parlamento de Andalucía, la primera institución donde tiene representación, y sus votos son claves para la estabilidad del Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla. Su primera iniciativa fue la polémica solicitud del presidente del grupo, Francisco Serrano, que reclamó a la Cámara un listado detallado de los nombres y apellidos de los funcionarios de la Junta que evalúan la violencia de género. Serrano buscaba “depurar los informes ideológicos” que, supuestamente, realizan estos trabajadores.
Ahora Vox reincide en su política de lucha contra las políticas de igualdad y los movimientos feministas con esta iniciativa que denuncia a “quienes han usurpado la representación exclusiva y excluyente de la mujer en España”. “El feminismo supremacista de género no cuenta con la confianza de los españoles, ni siquiera de las propias mujeres”, dice el texto de la propuesta. El partido de extrema derecha tiene 12 diputados en la Cámara, de modo que cuenta con menos margen legislativo que otros grupos para presentar sus iniciativas en el Pleno. Ésta es la primera que llevarán al Pleno de la semana que viene, pero también han registrado una segunda proposición no de ley en la que pide a la Cámara que condene los ataques a Vox, “un partido votado democráticamente”, y subraya el suceso de una alumna de Málaga que fue insultada por sus compañeras “por llevar una pulsera con el logo de Vox”.
El partido de Abascal es quien sostiene al Gobierno de PP y Ciudadanos, pero a la vez representa un elemento de inestabilidad que da armas a la oposición de izquierdas cada vez que plantea una iniciativa. Vox exigió a los populares la derogación de las leyes andaluzas de igualdad y lucha contra la violencia de género a cambio de apoyar la investidura de Moreno Bonilla, aunque finalmente aceptaron renunciar a esta petición a corto plazo. Ahora su proposición no de ley plantea al Parlamento que haga suya expresiones de este tipo: “Las feministas marxistas jamás han cumplido con los fines que dicen sostener, pues sólo saben reclamar dinero y más dinero para la promoción de su ideología”.