Desde míticas tiendas como Pepe El Árabe, Índigo o terrazas del casco: los comercios de Arucas luchan por volver a la normalidad

Una de las dueñas de Índigo, popular tienda de Arucas, pone todo a punto para la apertura.

Jennifer Jiménez

Las Palmas de Gran Canaria —

0

Cuando la popular tienda Pepe El Árabe abrió en Arucas, todo el municipio lloraba la muerte de Tonono, el legendario jugador de la UD Las Palmas. Era el año 1975 y en un día tan amargo se cocían también las bases de un pequeño comercio que forma parte de la vida de los aruquenses. Entre toallas, sábanas, ropa… y un poco de casi todo, atiende Pedro, hijo de Pepe, ya retirado, pero que a veces se pasa por la tienda en la que lleva toda la vida. La semana pasada abrió con cita previa, pero este lunes ya se empezaba a animar el ambiente por las calles, con las terrazas abiertas a la mitad de su capacidad de aforo y otros pequeños comercios de la zona con la persiana subida. “Espero que no se olviden de nosotros cuando empiecen abrir los centros comerciales”, apuntan algunos de los pequeños empresarios.

No llevan 45 años, pero sí 20 en abierto. Son las dueñas de Índigo, una tienda de ropa y complementos que transmite positividad desde que pones un paso en ella. Susi y Rosi recuerdan que estos meses han sido duros, sobre todo llenos de incertidumbre y que este lunes han abierto con muchas dudas aún sobre qué ocurrirá, cómo será eso que llaman ahora “nueva normalidad” y tomando muchas medidas de higiene. Para entrar en la tienda es necesario primero desinfectarse las manos y el aforo está restringido a dos personas. Susi limpia con esmero todos los accesorios, muchos recién llegados y recuerda que en este comercio suelen dar un trato personalizado, algo que seguirán haciendo pero guardando las distancias de seguridad. La ropa se podrá probar pero luego hay que desinfectarla pasándola por una plancha de vapor, con la que ya contaban.

Otros comerciantes y vecinos del municipio se acercan a saludar a estas dos socias. Al lado se escucha el ruido de una cafetería, donde, en su terraza, en la que ya hay clientes, se respeta el espacio. Susi y Rosi se muestran cautelosas, “después del parón de dos meses, ahora la vuelta a empezar es como si todo fuese nuevo y con un poco de nervios que imagino que a medida de que pasen un poco los días se nos quitarán”. A pesar del confinamiento, ambas mantuvieron el contacto con la clientela a través de las redes sociales. Este mismo lunes, algunas personas ya acudían a buscar encargos que les habían hecho en estos meses. “Al principio, como había incertidumbre, no hicimos nada, pero después de 15 días sí quisimos empezar a darle un poco de color y empezamos a subir prendas que nos habían llegado justo la semana en la que cerramos para animarnos nosotras mismas y a la gente”, destaca Rosi. Por su parte, Susi afirma que ya están valorando crear una página web para poder vender online.

Por esta línea ha apostado María Elena Alemán Falcón, dueña de una pequeña tienda de juguetería educativa y también librería que lleva casi dos años junto al mítico Parque de Las Flores, La Vaca Valiente. Los comerciantes de la zona la señalan y la recomiendan como ejemplo de emprendedora y buena compañera. Durante el confinamiento primero empezó con la venta telefónica y después ha puesto en marcha la venta de comercio online. “Me he adaptado un poquito a la situación, pero trabajando sobre todo las 24 horas del día”, afirma. Y es que la tienda solo la lleva ella y siente incertidumbre de cara al futuro. “En junio nos reuníamos varias marcas en Barcelona para hacer la precompra de cara a la Navidad y nos enviaban los productos en septiembre más tardar. Lo que pasa es que ahora no sé si en junio nos volverán a echar para atrás, si esto caminará bien, no sabemos. Entonces, realmente en la campaña de Navidad no pienso, solo pienso en el día a día”. Aunque ya no se necesita cita previa, aconseja a sus clientes que soliciten hora por prevención. Además, hay gente que compra online y recoge en tienda pero también ha mantenido el servicio a domicilio.

Otro comercio destacado en el municipio norteño es Deportes Arucas. Mapi cuenta que desde la semana pasada el local abrió con cita previa. “Despacito, pero bueno, mejor que en cuarentena”, cuenta. De cara al futuro señala que con el pequeño comercio “nunca se sabe, pero ya han dado el paso de abrir que es lo importante”. En este espacio, las medidas de higiene son también muy estrictas. Los clientes tienen la obligación de ponerse gel desinfectante y las zapatillas se prueban con un calcetín de plástico que luego se tira. Además, el probador se desinfecta cada vez que entra alguien y si el cliente se prueba alguna prenda que luego no se lleva, pues esa ropa se pone en cuarentena en el almacén.

Si hay un sector muy aclamado por la ciudadanía es el de la hostelería. Este lunes las terrazas han podido abrir al 50%, aunque desde el Ayuntamiento de Arucas se han puesto facilidades para que los establecimientos ampliaran espacios siempre y cuando fuera posible. También se ha aplazado el pago de todo tipo de tasas hasta 2021. Uno de estos empresarios es José Francisco Araña Reyes, que sobre las 10.00 de la mañana ya tenía su local (La Cantonera de Arucas) desinfectado y estaba montando su terraza, “hoy con alegría, como si fuera la primera vez con el negocio abierto”, cuenta. Explica que para hoy ya tenía mesas reservadas: “espero que no sean estas solas, que venga mucha más gente y que se vayan quitando un poco el miedo” y anima al sector a que afronte este momento con ánimo, ya que vienen tiempos duros, pero considera que es necesario apoyarse entre todos para salir adelante. Y así, entre saludos, sonrisas que se esconden tras las mascarillas y reencuentros transcurre este primer día de la primera fase de desescalada.

Etiquetas
stats