Sniace plantea destinar su suelo sobrante a nuevas industrias si no cubre la ampliación de capital

Sniace se prepara para afrontar unas semanas clave para su futuro. Aunque con retraso en los plazos previstos, la factoría de Torrelavega sigue la hoja de ruta marcada hace meses en el plan de viabilidad aprobado por los acreedores e iniciará próximamente el proceso de ampliación de capital con el que el grupo químico espera ingresar 15,5 millones de euros que permitan reabrir tras más de dos años sin actividad.    

Tanto los accionistas como el comité de empresa son “optimistas” de cara a que la operación llegue a buen puerto y la principal industria de la capital del Besaya reincorpore durante este año al más de medio millar de trabajadores despedidos en 2013. No obstante, Sniace, en colaboración con el Gobierno de Cantabria, tiene un 'plan B' por si la aportación de los inversores no alcanza esos 15 millones de euros.  

La alternativa de los propietarios de la empresa pasa por poner en valor los terrenos adyacentes a la propia Sniace pero no para construir viviendas, como se ha barajado en otras ocasiones, sino para albergar nuevas industrias. Son más de 100.000 metros cuadrados situados en una zona atractiva desde el punto de vista empresarial. 

El desarrollo de esta especie de nuevo polígono industrial tampoco sería una meta fácil de lograr pero cuenta con el respaldo del Gobierno de Cantabria, que negocia desde hace meses con varias empresas su instalación en la comunidad autónoma, según ha asegurado el presidente Miguel Ángel Revilla.   

Ha sido, precisamente, el líder del PRC el que ha dado a conocer esta alternativa. Se trata de uno los acuerdos a los que el Ejecutivo autonómico ha llegado con la empresa en el supuesto de que no se cubra la ampliación de capital, “compromisos” que no suponen en ningún caso aportación de dinero.

Además, contribuiría a mejorar la imagen de las instalaciones fabriles, que en la actualidad ofrecen “un espectáculo deprimente”, según ha apuntado el propio Revilla, que ha descartado la recalificación de estos terrenos para construir viviendas. 

Por el contrario, el presidente ha insistido en que dar un uso industrial a esa zona “parece lógico”, y ha recalcado que la ubicación es “privilegiada” y que “no hay otro lugar” que tenga “tan cerca” el suministro eléctrico y de agua, la autovía, el ferrocarril, el puerto y el aeropuerto.

Revilla ha reconocido que el panorama de la industria en Cantabria es “complicado”, pero ha confiado en que Sniace, después de dos años parada, vuelva a funcionar “dentro de dos o tres meses” y ello suponga “un punto de inflexión” después de “tanta mala noticia”.

En esta línea, ha afirmado que el Gobierno está hablando “con muchísimas empresas”, y ha estimado que “cuatro o cinco” se van a instalar este año, “la mayor de 250 trabajadores”, ha apostillado durante una entrevista concedida a Radio Santander.

Finalmente, en términos de desempleo, Revilla ha dicho que su objetivo de legislatura es reducir el paro en 10.000 personas, y acabar el mandato con “2.000 parados menos” de los que había “cuando me fui en 2011”, cuando estaba en el 14,21%, con 41.800 desempleados.