Josep Maria Padrosa, número 2 del departamento de Salud, representa empresas que facturaron en conjunto 14 millones a la Generalitat en 2012, según ha desvelado El País
El director del Servicio Catalán de la Salud (Cat Salut), Josep Maria Padrosa, contrata para la Generalitat los servicios de seis empresas privadas de las cuales es apoderado. En total, el año 2012 el conjunto de estas firmas facturó al departamento de Salud, del que Padrosa es el número 2, hasta 14 millones, lo que podría ir en contra de la ley catalana de compatibilidades, según desvelado este miércoles el diario El País.
Padrosa entró a dirigir el CatSalut en 2010 de la mano del conseller Boi Ruiz, que hasta entonces era presidente de la patronal Unión Catalana de Hospitales y que se llevó con él al departamento a parte de la cúpula del organismo, entre los cuales estaba Padrosa. El ahora número 2 de Salud dirigía la Corporación Fisiogestión, holding de seis empresas sanitarias. Al entrar en el CatSalut abandonó su dirección, pero sigue siendo apoderado de las empresas.
El rotativo informa que, además, las empresas que representa Padrosa, que efectúan la práctica totalidad de sus negocios con la Generalitat, no han sufrido tanto los recortes como lo han hecho los centros sanitarios públicos. Desde el año 2011 los ajustes a algunos hospitales han llegado al 20% de su presupuesto, mientras que en las empresas de Padrosa no han superado el 9%.
El administrador del holding ha admitido a El País que Padrosa sigue teniendo poderes sobre las empresas, aunque ha defendido que en ningún momento los ha utilizado.
La PARS pide la dimisión de Padrosa por incompatibilidades
La Plataforma de Afectados por los Recortes Sanitarias (PARS) considera que la situación de Padrosa incumple dos normativas: la Ley de Incompatibilidades que impide a Altos Cargos tener representaciones en empresas privadas, y la Ley de Ordenación Sanitaria, que estipula que ningún miembro del consejo del CatSalut puede tener vinculación con empresas que presten servicios en el organismo.
“El consejero Boi Ruiz no puede demorar una investigación sobre los hechos”, expresan desde la PARS, que ya han puesto en marcha una campaña en las redes sociales para pedir la dimisión de Padrosa. “Basta de impunidad”, denuncian, “lo que está en juego no es sólo nuestra salud física y mental, sino nuestra salud como sociedad democrática”, añaden.