El barómetro de la Generalitat revela que más de dos tercios de los valencianos apoyan aumentar la inversión en energías renovables y en agua desalada
Las principales preocupaciones de los valencianos son el empleo, la sanidad y el aumento de precios, pero ha decrecido la cantidad de personas que tienen una percepción negativa de la situación en general. Según el último barómetro de la Generalitat Valenciana, un 36,6% de los ciudadanos sitúa el empleo como uno de los tres primeros problemas de la Comunitat Valenciana; un 36,2% lo hace con la Sanidad y un 19,8% con el coste de la vida elevado.
Los resultados de la encuesta, presentados este miércoles por la directora general de Análisis y Políticas Públicas, Ana Berenguer, apuntan a un descenso del pesimismo. La mitad de los encuestados no identifica un tercer problema en general, ni tampoco para su situación personal, entre las más de 5.000 entrevistas realizadas entre octubre y diciembre de 2022. Según la directora general, la preocupación por las cuestiones económicas se encuentra en “mínimos históricos”.
El barómetro, que puede consultarse en el portal Argos de la Generalitat Valenciana, no pregunta por cuestiones electorales ni pide una valoración específica de las políticas públicas, pero el grado de conocimiento y de acuerdo con las medidas del Consell que lidera Ximo Puig arrojan resultados esperanzadores para la reedición de un pacto de Gobierno de izquierdas.
En comparación al barómetro de 2021, la preocupación por el empleo en la sociedad valenciana ha bajado más de un 13% y sigue acusando un descenso: el pasado año rozaba el 50% y llegó a superar el 75% en los últimos años de la crisis. Sin embargo, la preocupación por la subida de precios ha ascendido del 9,3% al 19,8%, en un año marcado por una subida del precio de los alimentos superior al 16%. La corrupción, uno de los factores clave que provocó el cambio de mayorías parlamentarias en 2015, ha desaparecido como problema: lo es para el 2,9% de los encuestados.
La encuesta plantea algunos aspectos clave en las políticas públicas relativos al cambio climático y la insuficiencia de recursos. En general hay un gran apoyo a las medidas para acelerar la transición energética, con un 75% de encuestados muy de acuerdo con intensificar la inversión en energías renovables. Este apoyo se encuentra en todos los partidos políticos -los encuestados informan sobre su afinidad política-, incluso entre los simpatizantes de Vox, que piden más inversión en un 57%. Son los afines a Compromís entre quienes más apoyo se manifiesta, con un 86% de quienes se declaran a favor de estas medidas.
Por distribución geográfica, las renovables encuentran más apoyo en el las comarcas de Castellón, con un 85,2%; mientras que en el área metropolitana de Valencia baja al 67% esta demanda. En el interior de Valencia el apoyo vuelve a crecer hasta el 73,9% y en Alicante supera el 80%. Es precisamente en el punto que más demanda energética se necesita donde los encuestados muestran menos fervor por esta cuestión, mientras que en los lugares donde se concentran las protestas y los proyectos solares y eólicos es donde hay un apoyo superior.
Respecto al déficit de recursos hídricos, una cuestión clave especialmente en las comarcas del sur de Alicante, el 70% de los encuestados se muestran a favor de aumentar el uso de agua desalada y depurada. En el total autonómico, el porcentaje es del 65,4%, algo menor en las comarcas de Castellón. Por afinidad política, de nuevo, se encuentra un elevado grado de aceptación en todos los partidos. Predomina en Compromís, con un 72%, y es mayoritario hasta en Vox, con un 56,8%.
Los grandes proyectos de inversión en la Comunitat Valenciana han conseguido cierta notoriedad, especialmente la gigafactoría de Volskwagen en Sagunto: el 54% la conoce, el 75% la considera una inversión importante. Le sigue el proyecto de reactivación de la Ciudad de la Luz de Alicante, que conoce casi un 40% de los encuestados y considera importante en la misma medida. Los porcentajes bajan con algunas iniciativas más sectoriales, todas ellas conocidas por más de un 20% de los preguntados: las infraestructuras sanitarias, el plan Reactiva, el plan de la Vega Baja Renhace y la transformación energética de la industria en Castellón.
Para la directora general de Análisis, el barómetro “muestra una percepción de los valencianos de estabilidad social y política y de un aumento del apoyo del estado de las autonomías y del gobierno autonómico, tal y como lo conocemos, junto a emociones de orgullo asociadas a la transformación del modelo de la Comunitat Valenciana en los últimos años”. Berenguer, experta en políticas públicas, considera que las preocupaciones ciudadanas se han transformado “radicalmente” en los últimos años y van en línea con lo que se manifiesta en el resto de Europa, dejando atrás la hipoteca reputacional.
0