Los ecologistas rechazan la declaración de la emergencia cinegética en Extremadura otra vez

Las asociaciones ecologistas de Extremadura se oponen a la futura declaración de emergencia cinegética en la región por supuestas enfermedades y por la sobrepoblación de animales en determinadas zonas, ya que, entre otras razones, dudan de su eficacia, tal y como expusieron en la reunión del Consejo Regional de Caza celebrada en Badajoz el pasado 13 de septiembre.

En esa reunión, el representante de Junta de Extremadura expuso el borrador del nuevo decreto sobre emergencia cinegética en la comunidad autónoma, que, a juicio de los ecologistas, continúa con la regulación marcada desde el año 2017.

El representante de Ecologistas Extremadura propuesto por las asociaciones conservacionistas consideró que este decreto no es más que una forma “de dar vía ancha a los cazadores para cazar en cualquier época del año”. Estas organizaciones dudan de la eficacia de esta medida para controlar patologías, a la vista de los años que se vienen realizando sin que aparentemente cambie la situación sanitaria.

A juicio de las ONG, si se declaran emergencias deben de ser por un tiempo delimitado por razones técnicas objetivas, ya que es “inaceptable” que sea de carácter indefinido por ser dañino sobre la naturaleza y las especies cinegéticas. En este sentido, advirtieron de que, por ejemplo, se influye en las épocas de reproducción de la mayoría de las especies.

Los ecologistas plantearon que si se busca rebajar los tamaños poblacionales, que es una de las motivaciones para la emergencia, hay que actuar contra la suplementación de alimento para los jabalíes y tener en cuenta que “una mayor presión cinegética, según varios estudios, provoca que haya mayor número de ejemplares, pero de menor tamaño, por la gran adaptación reproductiva de esta especie”. Y además apuntaron que una de las causas del problema de las enfermedades puede estar en ocasiones en que, al quedar los cadáveres de jabalíes ocultos entre la vegetación, las aves carroñeras no puedan llevar a cabo su labor sanitaria. Esto puede llevar a que los propios jabalíes puedan comer carne que puede tener infecciones.

Las asociaciones representadas en el Consejo Regional de Caza fueron ADENEX, AMUS, ANSER, DEMA, Ecologistas en Acción de Extremadura, Ecologistas Extremadura, GRUS y Sociedad Extremeña de Zoología.