Extremadura tranquiliza sobre el riesgo para la salud del aceite de oliva inmovilizada

La Junta de Extremadura ha trasladado este viernes un mensaje de tranquilidad sobre el posible riesgo para la salud del consumo de aceite mal etiquetado procedente de empresas andaluzas que, hasta el momento, ha provocado la inmovilización de más de 10.000 litros, sobre todo en la provincia de Badajoz.

En declaraciones a EFE, el subdirector de Calidad Alimentaria de la Junta, Santiago Malpica, ha detallado que se trabaja conjuntamente con Guardia Civil y el Instituto de Consumo para saber con certeza la cantidad inmovilizada, aunque si se tiene conocimiento de que “puntualmente” desde un almacén de Extremadura se habría vendido a otras comunidades como Madrid, Baleares y País Vasco.

Entre las marcas intervenidas hasta el momento se encuentran Acebuche, Virgen del Guadiana, Cortijo del Oro, La Campiña de Andalucía, Galiaceite 2022, La Abadía, Villa de Jerez, Don Jaén Aceite 2019 e Imperio Andaluz.

La envasadora andaluza, según ha explicado Santiago Malpica, tuvo registro sanitario en su día pero se dio de baja, “por lo que es clandestina y no tiene control sanitario, y solo eso ya es un motivo de inmovilización”.

Además los envases están mal etiquetados, con número de registros que no existen y otros que proceden también de Andalucía pero entran a través de Portugal, con un número de registro de ese país, por lo que se dio traslado a la Agencia Española de Salud Alimentaria para que se pusiese en contacto con las autoridades lusas.

Malpica ha reconocido que es un trabajo complicado porque son muchas marcas y ha insistido en que “aunque hay que ser cautos, no se estaría ante un problema de salud, sino de fraude”, aunque se está a la espera de los análisis y cuando se tengan se verá que tipo de aceites.

Según ha dicho, se sospecha que son mezcla de diferentes calidades y se analiza si en alguno de ellos hubiera lampante, que no es útil para el consumo humano. “El lampante es de la peor calidad, lo último que sale de la aceituna y recibe su nombre porque se utilizaba para las lamparas”, ha señalado Santiago Malpica, que ha añadido que si así fuera se daría traslado a la Guardia Civil.

El hecho de que este aceite esté muy repartido se debe a que se ha vendido principalmente en mercadillos, gasolineras y pequeñas tiendas, no en grandes superficies, y a un precio más barato en relación a los precios actuales de este producto.

Desde la Junta de Extremadura se recomienda a la población que en caso de tener en su casa este aceite se abstenga de consumirlo y que los comunique a los farmacéuticos o veterinarios de su zona de salud.