Traviesas del siglo XIX y máquinas diésel: el agravio del tren en Extremadura en siete claves
Este sábado una gran protesta ha sido organizada en la plaza de España de Madrid para reclamar un tren digno para Extremadura. Algunas voces hablan de que será la gran manifestación de la región extremeña de los últimos 40 años, en la que se espera la participación de más de 15.000 personas.
Serán fletados más de 300 autobuses, que partirán hacia la capital española desde todos los puntos de la región. Se unirá una caravana de paisanos extremeños residentes en Euskadi o Cataluña, convocados por las federaciones de asociaciones extremeñas en el exterior. Estas son las claves para comprender las reivindicaciones por el tren digno en Extremadura:
1. Una avería cada 11 horas. Averías, retrasos que obligan a fletar a los viajeros, o incluso motores que salen ardiendo, se han convertido en situaciones frecuentes en las líneas ferroviarias de la comunidad. Entre los meses de junio y noviembre las incidencias superan el medio centenar, según los datos que facilitados por la Junta a este diario. Se calcula que hay una avería en las líneas de Extremadura cada 11 horas, y los retrasos acumulados van entre los 20 minutos y las cuatro horas.
En el trayecto Cáceres-Sevilla, que dura cinco horas, no hay agua en el tren ni acceso al WC adaptado para personas con discapacidad.
Los usuarios de los trenes narran de manera reiterada situaciones en las que han permanecido este verano horas “tirados en un secarral”. El presidente de ADIF, Juan Bravo, ha reconocido que la situación del ferrocarril en Extremadura es “inexplicable” en pleno siglo XXI.
2. El 15% de las traviesas de la comunidad es del siglo XIX, y es el ferrocarril más antiguo de España. No hay ni un solo kilómetro de vía electrificada, o con doble vía, es la única Comunidad con esa pésima infraestructura.A
Aún funcionan carriles (raíles) de hace casi 150 años, se han detectado en las cercanías de Usagre al sureste de la provincia de Badajoz en la línea Mérida-Sevilla.
En Extremadura hay aún más de 100 kilómetros de vía en servicio (de los 725 kilómetros de la red) con estructuras de hace más de un siglo: vías sin soldar y traviesas de madera. Hay tramos como Castuera-Cabeza del Buey, por el que circulan trenes que podrían ir a 160 kilómetros por hora, pero que deben ir a 50 kilómetros por hora, o incluso menos, por las limitaciones impuestas por las infraestructuras.
3. No existe un tren de larga distancia (también es la única Comunidad sin él) y se tarda menos en coche que en tren. Los trayectos van desde las 5 horas y veinte minutos hasta las 8 horas y media, con precios de entre 38 y 51 euros. La velocidad media es de 86 kilómetros, aunque hay tramos de hasta 40 kilómetros por hora.
Ningún extremeño puede estar durante la mañana en Madrid si coge los primeros trenes del día. A primera hora solo hay dos, a las 06,58 y las 7,17 minutos. Esto significa que el primer convoy llega pasadas las doces del medio día, siempre que no haya retrasos.
4. En marzo de 2016 nacía el Pacto Social y Político por el Ferrocarril, al que se han adherido cientos de organizaciones, entre municipios, partidos y sindicatos, asociaciones y la ciudadanía extremeña. Hace ahora un año comenzaron las protestas para reclamar un tren digno, de la mano de una gran concentración por las calles de Badajoz.
Recientemente sacó un vídeo de este movimiento reivindicativo regional:
El pacto por el ferrocarril denuncia que Extremadura nunca tuvo un trato favorable ni en el trazado ni en el desarrollo de la red ferroviaria nacional, “y eso ha supuesto un lastre determinante en su desarrollo y cohesión social y territorial”.
Reclaman un ferrocarril social, de gestión pública, que mantenga y genere empleo y que vertebre internamente la región. Aboga por la conexión con el resto de España, Portugal y Europa, tal como indican las directrices del Parlamento y el Consejo Europeo plasmadas en la Red Transeuropea deTransporte (TEN-T), a través de los tresgrandes Corredores (Atlántico, Central Mediterráneo).
5. En 1985 echaba el cierre al tren Ruta de la Plata, que conectaba todo el oeste peninsular por ferrocarril, con la desconexión de la línea entre Plasencia y Astorga. A ello se suma que en 2012 Extremadura se quedó sin el Tren-hotel Lusitania, que unía Madrid con Lisboa a través de Valencia de Alcántara (Cáceres y cuyo trayecto fue modifiado para que discurrir desde entonces por la vía mde Fuentes de Oñoro (Salamanca).
6. En 2003, José María Aznar y el primer ministro portugués, José Manuel Durão Barroso, firmaban en la cumbre ibérica celebrada en Figueira da Foz el trazado final del AVE Madrid-Lisboa, previsto para 2010, y que iba a pasar por Extremadura. También una línea de mercancías, el Eje 16.
Ninguna de las dos promesas ha llegado, y las obras del AVE siguen su curso. Según las previsiones ministeriales, y al margen de que se trabaja en numerosos tramos, en verano de 2019 terminarán todas las obras de la plataforma Plasencia-Badajoz de Alta Velocidad y en 2020 se concluirá su electrificación, lo que supondrá en sí la materialización de la alta velocidad, pero solo dentro de la región porque en la parte de Castilla-La Mancha (Toledo) no hay nada hecho.
7. Badajoz: tan lejos como una isla. En un mapa de España viendo los tiempos de viaje por carretera desde Madrid a las capitales de provincia y comparándolo con otro de tiempos por ferrocarril, Extremadura es el único caso donde el tiempo de viaje aumenta, y la posición de Badajoz se acercaría a la de las Azores.