Segunda búsqueda de la fosa miliciana en Montecarmelo después de un primer intento fallido

Reactivada la búsqueda de los posibles restos de 451 Brigadistas Internacionales en la parcela de Montecarmelo donde el Ayuntamiento de Madrid planea instalar un cantón de limpieza. El Ministerio de Memoria Democrática que lidera Ángel Víctor Torres ha vuelto a emprender las prospecciones en los terrenos con objetivo de hallar la posible fosa.

Los operarios están peinando en esta ocasión la zona trasera del cementerio de Fuencarral, con la asociación científica de arqueólogos Arqueoantro de nuevo al frente, según recoge El País. La primera cata se efectuó en las zonas marcadas y autorizadas por el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida, por lo que la investigación que se desarrolla ahora podría arrojar en esta ocasión resultados concluyentes.

Eso es al menos lo que esperan tanto desde el equipo de arqueólogos (que ya solicitaron nuevas inspecciones al Ayuntamiento por considerar otros terrenos “susceptibles de que puedan contener restos arqueológicos relevantes”) como muchos vecinos de la zona. Estos últimos llevan años movilizados para frenar la instalación de un cantón de limpieza y un Selur (base del servicio de limpieza urgente) a pocos metros de sus viviendas.

La posible existencia de esta fosa, en la que según la Asociación de Amigos de las Brigadas Internacionales (AABI) podrían encontrase hasta 451 cuerpos, se había convertido en uno de los principales argumentos esgrimidos por residentes del entorno de Montecarmelo para exigir al Consistorio una nueva localización del cantón de limpieza. La oposición vecinal pide trasladar el recinto para depósito de residuos y utilización del personal de limpieza hasta terrenos más alejados de sus barrios, de centros educativos y de locales de restauración o supermercados.

Desde la Asociación Vecinal de Montecarmelo resumían los motivos de su confrontación en conversación con Somos Madrid: “No pueden decir que la ubicación ideal para una central de camiones y basura (incluido amianto), más grande que la Plaza Mayor de Madrid (10.000 metros cuadrados frente a 9.500), es entre tres coles con 4.200 niños de 0 a 18 años. Afecta a todo un barrio con una de las mayores tasas de población infantil de la capital (6.000 niños). La Ley de protección de la infancia y adolescencia establece que los menores deben desarrollarse en un entorno seguro y saludable. Esto no lo es”.